domingo, 18 de noviembre de 2012

AYUDAMEMORIA: MUJICA Y LA ORGIPIÑATA

Amigos lectores:
Esta semana verán dos 'ayudamemorias' algo extrañas: la vida de José Mujica y una de las 'orgipiñatas' en nuestra Asamblea. Son ejemplos de Perfil y Crónica para los talleristas con quienes estaré conversando y para todos quienes gusten de la buena lectura.

PERFIL
PEPE MUJICA CANDIDATO A PRESIDENTE DE URUGUAY
Gatopardo. Por César Bianchi | Octubre 2009
A Pepe no hay cosa que le guste más que reflexionar sobre la naturaleza. Pero no tiene todo el tiempo que quisiera para dedicarle a la floricultura y las cuestiones agrarias. A la fuerza, dice, lo obligaron a “agarrar una changa” y como se comprometió, se va hacer cargo. La “changa”, como se llama a los trabajos de ocasión en el Cono Sur, es ser el candidato de la izquierda a presidente de Uruguay. José Pepe Mujica está en camino de hacerle ese favor al oficialismo: triunfó ampliamente en las elecciones internas partidarias del Frente Amplio, una coalición de partidos de izquierda, el 28 de junio pasado.

Es un hombre de 74 años, feliz cuando trabaja en su chacra, llamada Puebla: plantando forraje o alfalfa, cosechando habas o arvejas en invierno o esperando tomates, zapallos y maíz en verano.

Con los pantalones arremangados que dejan ver las pantorrillas del ciclista que alguna vez fue, las medias rotas, un buzo raído y una boina de otra época, vuelve a confesar que no tiene muchas ganas de ser presidente de un país que alguna vez definió como “un país gil (pendejo)”, porque más de 90% de las semillas que produce, las exporta sin procesar. En otra oportunidad ha dicho que “Uruguay es viable y tiene porvenir, lástima que esté lleno de uruguayos”.

No tiene más remedio que “agarrar la changa”: es el único que puede asegurarle la permanencia en el gobierno al Frente Amplio, que llegó al poder por primera vez en 2004 con el presidente Tabaré Vázquez, el político más popular del país pero fuera de concurso, porque en Uruguay no existe la reelección.

Mujica mismo se definió una vez como “un terrón con patas”. Con 54% de las preferencias le ganó cómodamente en las internas a Danilo Astori (38%), un atildado ex ministro de Economía que fue rector de la Universidad de la República a los 32 años. Astori —delfín del actual presidente Vázquez— es un amante del jazz, un intelectual que en su juventud siguió la corriente estructuralista de la Cepal. En la interna Mujica también venció a Marcos Carámbula, uno de los gobernadores municipales más exitosos del primer gobierno de izquierda, pero que apenas obtuvo ocho por ciento.

“Sigo teniendo más ganas de estar en la chacra, claro. Presidente voy a ser… pero el que tenemos es médico y a él le gusta mucho más ser médico que presidente”, me dijo en su casa, al lado de la estufa, en una entrevista que concedió a desgano, y antes de triunfar en las internas. Estaba malhumorado porque se le había roto el tractor y debió interrumpir sus tareas para ir a la ferretería del barrio a comprar filtros nuevos.

Lucía Topolansky, su compañera, se fue hasta la huerta a persuadirlo para que hablara con la visita. Este hombre tiene mucho de espontáneo pero es un brillante estratega de la comunicación. Con un lenguaje didáctico, pero poco ortodoxo para un político, matizado con malas palabras y metáforas campesinas, logró seducir al “pueblo” hace un lustro, cuando fue el legislador más elegido con 330 mil votos y él solo superó al histórico Partido Colorado.

El Colorado es el partido acostumbrado a gobernar Uruguay desde 1830, cuando el país logró su independencia. En 1836, los que apoyaban al primer presidente, Fructuoso Rivera (1830-1834), y los que adherían al entonces mandatario Manuel Oribe, se enfrentaron en la Batalla de Carpintería: allí surgieron las divisas colorada y blanca. Los blancos (Partido Nacional) cortaron la hegemonía en 1958 y el Frente Amplio —primera manifestación de izquierda en el poder— recién quebró el bipartidismo en el siglo xxi, hace cinco años.

Pepe Mujica y Lucía Topolansky son, por ahora, senadores del Movimiento de Participación Popular (mpp) y tienen una modesta casita junto a su chacra en Rincón del Cerro, un barrio rural en la periferia de Montevideo, la capital del país. Viven como anacoretas, entre proyectos de ley y las legumbres de su quinta. Desde Puebla piensa gobernar si accede a la Presidencia de la República. El chacarero que prefiere su huerta a la banda presidencial, dice que tiene un puñado de ideas para aplicar “de entrada nomás”. Algunas de éstas le pusieron los pelos de punta a Astori, el ex ministro de Economía, hoy compañero de Pepe en la fórmula como candidato a vicepresidente. Mucho más horrorizaron a blancos y colorados.

Mujica ha propuesto discutir la propiedad privada, terminar con el secreto bancario, “importar” peruanos y bolivianos para que trabajen la tierra en el Uruguay rural “porque acá nadie quiere hacerlo”. Propuso que médicos y docentes recién recibidos se radiquen en el interior para ejercer y afirmó que a los adictos a las drogas duras “habría que agarrarlos del forro del culo y meterlos p’adentro de una chacra”, sin consultarlos. Otras ideas fueron más consensuadas: multiplicar las escuelas de tiempo completo, llevar la universidad pública fuera de la capital.

Pepe, que cuando jovencito tuvo una formación ecléctica —fue un anarquista precoz, comunista fugaz, joven allegado a los blancos hasta que fue guerrillero— hoy se dice más cerca de Marx que de Lenin, pero ya no reniega del capitalismo. “En ninguna parte el tipo [Marx] dijo que se iba a construir una sociedad mejor a partir de una sociedad pobre. Eso fue un invento que vino después. Él lo veía como la maduración de una sociedad capitalista recontra abundante y rica. A Lenin lo pongo en la picota”.

Analiza el politólogo Adolfo Garcé: “De despreciar la democracia burguesa a valorarla, de subestimar el camino electoral a convertirse en maestro en la competencia política, de sostener un antiimperialismo radical a admitir que puede ser positiva para el desarrollo nacional la inversión extranjera directa y la instalación de grandes empresas multinacionales”. Tales son las piruetas de un transformista al que “la calle” viene empujando para avanzar con más determinación hacia el socialismo.

Mujica mira fijo y levanta el tono de voz para decir que él no es un revolucionario domesticado que se pasó al capitalismo, como otros que creen que es el reino de la libertad. “¡Qué va a ser! Si tiene cada injusticia brutal. Hay que luchar por recrear otros caminos. Pero tampoco estoy pa’ cometer los mismos errores que cometimos, porque si no, no aprendimos nada”.

Se acomoda la boina, muestra sus uñas sucias de tierra. Dice que quiere que todos los pobres sean cultos y por eso quiere masificar la enseñanza terciaria, que se ve como un sembrador de dudas, que conforme ha envejecido se ha vuelto escéptico y que como no está “gagá”, puede ver “más lejos”.

“Una de las ventajas que tiene ser viejo es decir lo que uno piensa. Y eso parece armar un revuelo de la puta madre que lo parió, porque este mundo es puro maquillaje: ‘que esto no se puede decir’, ‘aquello tampoco’. ¡La libertad está hipotecada!”.

Se ríe cuando se le pregunta si se siente preparado para el cargo. “Sí… de eso hacen un misterio. Ser buen presidente es saber elegir un grupo de ministros. Los que laburan, los que andan con un plumero en el culo son los ministros. Y no me vengan a encajar pacos [mentiras], porque voy a empezar a deschavar ex presidentes”.
***
Mujica encarna una de las reconversiones políticas más asombrosas de América Latina. Fue secretario de un ministro del derechista Partido Nacional cuando tenía 24 años y fue uno de los principales guerrilleros del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros (mln-t) en la década de 1960, cuando abrazó la lucha armada como forma de hacer la revolución. En 1962 armaron una infraestructura para defenderse ante un golpe de Estado que se les antojaba inminente. Las crisis financiera y bancaria del país de aquel momento, sumadas a la escasa credibilidad en el sistema político, fueron el caldo de cultivo para el accionar revolucionario de los tupamaros.

“El golpe se veía venir, estaba en el aire”, dice Mujica en su casa, entre pausas que hablan y a las que apela con frecuencia para darle más énfasis a lo dicho.

Pero el golpe de Estado del colorado Juan María Bordaberry se dio 11 años después del nacimiento del mln, y cuando la organización ya estaba desarticulada por los militares.

En 1964, Mujica fue detenido en un atraco frustrado a una fábrica textil. Se hizo pasar por un delincuente común para proteger a la organización y estuvo un año preso por tentativa de rapiña. “Ahí ya palpé las delicias de la represión. Anduve tres meses durmiendo boca arriba porque me dieron una biaba [golpiza], que casi me matan”.

Cuando salió, volvió a dedicarse a los bulbos de sus flores y a su chacra, comenzó a leer sobre biología y bioquímica, y a manipular revólveres mientras militaba en el legal Movimiento de Izquierda Revolucionaria (mir) de día y en el mln, ilegal, de noche.

Los “políticos con armas”, según los definió Mujica, ya operaban con fuerza: construían “cárceles del pueblo” donde alojaban a los secuestrados y “tatuceras” donde refugiarse y guardar pistolas y escopetas.

Los tupamaros robaron, secuestraron, organizaron atentados con bombas contra instituciones de la “oligarquía” y también mataron. El tupamaro Pepe ha reconocido que quizás-haya-tomado-decisiones-que-desembocaron-en-ejecuciones. No tiene muy claro si él mató o no.

Vistos en un principio como los Robin Hood criollos, los tupamaros empezaron siendo un puñado, a fines de 1969 ya eran dos mil y dos años después, cinco mil. “Nosotros fuimos creciendo hasta que quedamos desbordados. Fuimos prisioneros del éxito, lo que en la guerra se llama saturación”.

Ya clandestino, José Mujica se llamó Facundo y Ulpiano. En 1970, después de un intenso tiroteo, fue a tomar unas copas con dos “tupas” a un bar de Montevideo. Lo vieron acodado al mostrador y llamaron a la policía. Cuenta el ex tupamaro Mauricio Rosencof: “Pepe se aseguró el raje de los otros cuando cayó la cana, pero él no se pudo zafar. El policía que lo encañonaba estaba nervioso y Pepe se puso a tranquilizarlo. ‘Ojo, que se te puede escapar un tiro’, le decía. Y se le escapó un tiro. Pepe fue a parar al Hospital Militar”.

Había tantos tupamaros y allegados camuflados en la sociedad que a Mujica lo salvó un “compañero” cirujano. “Me sacó del cajón”.

Como guerrillero, Mujica era ejecutivo y pragmático, según la evocación de Eleuterio Fernández Huidobro, uno de los cabecillas. “Estaban los teóricos, que para hacer una cosa la complican, y estaba Pepe, que venía de trabajar la tierra. Era del tipo ‘al pan, pan, y al vino, vino’ y no le daba muchas vueltas”.

El 6 de septiembre de 1971 protagonizó una de las fugas carcelarias más espectaculares del siglo xx. Junto a 105 tupamaros y cinco presos comunes se escapó del Penal de Punta Carretas —devenido hoy curiosamente en shopping center— por un túnel de 40 metros. Fue una proeza de proporciones épicas inmortalizada en el libro Guinness con el sugestivo nombre de “El Abuso”. Dos meses antes, su joven compañera Lucía se había fugado junto a 37 tupamaras de la cárcel de mujeres. La libertad le duró poco a José Mujica; días después fue detenido de nuevo.

Estuvo, en total, 14 años preso en cárceles y cuarteles donde fue torturado sistemáticamente por ser considerado uno de los líderes de la inédita guerrilla urbana, desaconsejada por el propio Che Guevara en visita diplomática del gobierno cubano a Punta del Este. Pepe fue uno de los “nueve rehenes” del gobierno militar. Tres de esos años de reclusión los pasó en un calabozo, donde para no enloquecer se hizo amigo de nueve ranitas y comprobó que las hormigas gritan al acercar su oído a ellas.

Sufrió torturas físicas, pero siempre contó las psicológicas. Se debió conformar con ir una sola vez al baño encapuchado y esposado en los mejores días de arresto. En los peores, se orinó y defecó encima.

“Podría relatar las historias de Santa Clara, del cuartel donde estuve siete meses bañándome con una tacita, pasándome un pañito. O podría hablar de que me daban un paquete de tabaco cortado a la mitad y no me daban más durante un mes, aunque me decían que sí me daban, simplemente para generar la desesperación por la necesidad, al punto que para no dar el brazo a torcer un día les dije que no fumaba más —narró para la biografía que escribió Miguel Ángel Campodónico—. O podría recordar a un alférez que se levantaba a las cuatro de la mañana y nos ponía de plantón hasta que comenzaba la vida de cuartel. Podría hablar del acoso, de no dejarnos dormir y buscar todas las formas de “mortificarnos” inútilmente cuando no se precisaba nada”.

Cuando estuvo “sucuchado”, como él dice, en un sitio similar a un aljibe en Santa Clara de Olimar, departamento de Treinta y Tres, las condiciones de su encarcelamiento eran tan deplorables que llegó a enfermarse gravemente de los riñones y la vejiga. Debía tomar dos litros de agua por día, pero los militares apenas si le daban una taza diaria. Llegaron a darle de comer en cucharita cuando advirtieron que se les había ido la mano en el escarmiento.

Según Fernández Huidobro, en algún momento extremo no tuvo otra alternativa que beber su propio pis. “Pis”, dijo Huidobro hace un mes en un acto del Frente Amplio. “Tal vez tengamos un presidente que se tomó su propio pis”, le advirtió a los votantes intentando conquistarlos.

Vale el flashback: la madre de Pepe, Lucy Cordano, le había llevado una pelela [bacinica] rosada pero los soldados no se la querían dar. Como sufría de incontinencia la reclamó, pero le dijeron que no estaban autorizados por el Comando General de las Fuerzas Armadas. Y porque una de las torturas era no permitirle ir al baño. Recién cuando llegó la autorización, con la intermediación del presidente estadou-nidense Jimmy Carter, se apiadaron y le entregaron la pelela.

Lo pasearon por cuatro cuarteles del interior uruguayo como uno de los guerrilleros más temidos por el Ejército, y él siempre cargó con su pelela entre el precario equipaje. “La llevaba de un lado pa’l otro, la blandía como un trofeo. Fue una lucha gremial que gané. Era una lucha por el derecho a mear”, recuerda 26 años después.

En 1983, en el Penal de Libertad, por fin lo vio un médico. Entre la Cruz Roja y las autoridades de la cárcel le encomendaron la tarea de trabajar el cantero floral del penal, para que rumiara sus cavilaciones. Cuando en marzo de 1985, después de 13 años, obtuvo la libertad definitiva salió de la prisión con la pelela rosada florecida de caléndulas.

He ahí el segundo momento de su vida en que Pepe se sintió plenamente consciente de qué significa la libertad, según confesó en el viejo sillón rojo, en el living donde recibió a Gatopardo. “Fue cuando llegué al barrio y el frente de mi casa estaba lleno de amigos esperándome”.

El primero, paradójicamente, fue cuando todavía estaba preso: “Veníamos de los cuarteles y me llevaron al Penal de Libertad”. En Uruguay la cárcel más grande se conoce con ese nombre, porque está situada en la localidad Libertad del departamento de San José. “Me tiraron de un helicóptero tres o cuatro metros pa’ abajo, junto a otros. Sentí alegría porque iba a ver a los compañeros que hacía tiempazo que no sabía nada de ellos. Me llevaron a Libertad. Fue antes que arrancara la dictadura, cuando estábamos en los prolegómenos. Estábamos… como te digo una cosa, te digo la otra: una democracia atadita con alambre”.

Se fue de la “cana” sabiendo dos cosas: que volvería a militar y que algún día se dedicaría a su propia huerta por tiempo completo. Había anotado en un cuaderno sus ideas para formar una cooperativa de vecinos que trabajen la tierra y que puedan autoabastecerse con lo que produzcan.

La militancia política comenzó al día siguiente de estar en la calle. Dio su primer discurso en el Club Atlético Platense y para empezar a financiar el movimiento organizó una colecta entre los asistentes. Decidió meterse en el sistema político para cambiarlo desde adentro.

Así, a instancias de Pepe, los tupamaros instrumentaron las “mateadas”: salieron a recorrer los barrios de la capital y el interior para reunirse con los vecinos y conocer sus preocupaciones mientras compartían el mate, una infusión caliente, amarga y bien uruguaya, a base de yerba.

“En asambleas con compañeros que recién salían de la cárcel y otros que sobrevivieron calladamente la dictadura decidimos darnos un baño de pueblo. Había pasado el tiempo y el Uruguay era otro, teníamos que reconocer al país y el país nos tenía que reconocer a nosotros”, cuenta Lucía Topolansky.

Pepe estaba delgado, rapado y con la barba crecida. Todavía tenía aspecto de preso. Empezó a estrechar un contacto directo con la gente y a mostrarse como un orador con un discurso rústico pero entendible para el uruguayo común. El Mujica de hoy, con posibilidades ciertas de ser primer mandatario, hizo de su forma de comunicarse un arte.

El Movimiento de Participación Popular (mpp), la organización política que parieron los tupamaros, se integró al Frente Amplio en 1989, luego de un virulento debate intestino.

En 1995, el veterano ex guerrillero ingresó al Parlamento como diputado de la República. Cuenta la leyenda que el primer día de trabajo como legislador, Pepe —sin traje, con una campera usada y palillos de la ropa en el ruedo de sus pantalones— estacionó su moto Vespa frente al Palacio Legislativo. Cuando estaba entrando, un guardia se le acercó y le preguntó si pensaba estar mucho tiempo adentro. Mujica le contestó: “Si me dejan, cinco años”.

El destino todavía le tenía reservado un par de sorpresas. Con el gobierno del Frente Amplio, en 2004, fue nombrado ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca.

Fernández Huidobro y Rosencof, hoy reconocidos escritores, también se adaptaron al statu quo. El primero es senador por el mpp desde 1999. Rosencof es el director de la división de cultura de la Intendencia Municipal de Montevideo desde 2005. Ambos, en cada una de sus oficinas, tienen el busto de Raúl Sendic, el líder de aquel mln revolucionario.

El columnista político Tomás Linn no tiene claro cuánto hay de genuino y cuánto de simulado en el discurso de Mujica, eso de comerse las eses, decir “espetativa” en vez de “expectativa”, “pa” en lugar de “para” y hasta conjugar mal los verbos, una forma de hablar que le redituó en empatía con el uruguayo de a pie, y el pobre en particular. “Tampoco importa”, opina Linn.

“Cuando los políticos descubren que tienen posturas auténticas que seducen a la gente, las transforman en pose porque deben mantenerlas siempre a la vista y eso hace difícil determinar dónde está la frontera. El tema es que Mujica creó una ‘ola’, un ‘fenómeno’, y ningún argumento racional o fundamentado que pretenda cuestionarlo tendrá efecto”.

Hasta Fernández Huidobro —la gente le dice Ñato o lo llama por su segundo apellido— lo reconoce: “Siempre fue así, pero al darse cuenta de que su discurso caminaba, lo cultivó… ¡No lo iba a cambiar!”.

Y vaya si le dio resultado. Mujica es un político rara avis, uno de los más exóticos entre los de primera línea del Cono Sur. El 31 de octubre del año pasado, cuando celebraba el cuarto aniversario de la histórica victoria de la izquierda, cerró su oratoria en la localidad de Rosario, departamento de Colonia, en un escenario donde antes había hablado Danilo Astori.

Esa noche, ante tres mil adherentes del Frente Amplio, Astori se bajó del estrado y se fue hasta su auto acompañado por un hombre de su agrupación; en el coche, lo esperaba su mujer, que es también su secretaria. En dos minutos llegó al auto y se volvió a Montevideo. A Mujica le llevó 15 minutos llegar hasta su coche: fue acosado por decenas de militantes de todas las edades que se le tiraban encima, lo alentaban, le refregaban banderas tricolores por la cabeza, le ponían micrófonos sobre el bigote y no paraban de sacarle fotos con teléfonos celulares y cámaras digitales. Fue ovacionado por una multitud que le gritaba: “¡Pepe presidente!”, a un año de las elecciones nacionales. Y se dio el lujo de no hablar de política. En un discurso de Mujica, como el de aquella noche, se pueden distinguir distintos Pepes. Está el viejo sabio que aconseja: “¡Hay que decirle sí a la vida!”, “Las mujeres deben resucitar este país, nada es más importante que las mujeres. ¡Porque este país necesita coraje!” o cuando contó esta anécdota imperdible: “En un acto del Che me encontré con una gurisita con un pedo como para cuatrocientos. Me la agarré con las amigas: ‘¿Qué mierda tienen en la cabeza? Cuando una mujer está en ese estado tienen que darle una mano y llevarla a la casa a dormir. ¿A ustedes les parece que esto es homenajear al Che? ¡Qué va a ser libertad que se estropeen la vida así...!”. También se puede ver el poeta: “Cuando me toque mirarme en el espejo de la muerte, quiero estar conforme y haber cumplido conmigo mismo”, el antipoeta (“Este país no vive de poesía, vive de guiso de arroz o porotos”), el filósofo de la vida, el hombre de la calle: “Los que somos de izquierda somos filosóficamente distintos. El hombre es el problema, pero es también la esperanza. No vinimos a la vida pa’ explotar a los demás, pa’ chuparle la sangre a otros, ¡vinimos a convivir! […] No dejen que les afanen [roben] la vida. No dejen que se cambien los sentires [sic]”.

Ese mismo día, pero antes, durante un almuerzo con productores queseros de Colonia, me confesó —mientras se tomaba un whisky y se desabrochaba el cinto— que no tenía “ni idea” de qué hablaría en la noche, pero no iría a resaltar los logros del gobierno que él mismo había integrado como ministro. “Para eso está Astori”, dijo.

Después de tomar distancia del perfil académico de su oponente interno, dijo un par de cosas.

—¿Qué es lo que necesita el país, Pepe?

—Precisa todo. Precisa quien hable muy bien el inglés y tenga buena relación con los organismos internacionales, y precisa tener buena relación con la barra de “los astrosos” de América Latina. Ésa es mía: yo me llevo bien con Chávez, Lula, con Evo, con Correa…

—Pero también hay que llevarse bien con Estados Unidos…

—¡Claro! Hay que hacer filo con los de arriba y llevarse bien con los que te dije (y se estiró los ojos como achinados), que son los patrones de pasado mañana.

Recién comenzaba la carrera. En cada acto a donde fue Pepe en los últimos 10 meses se repitieron el tumulto, las aglomeraciones que no lo dejaban caminar, las fotitos desde los celulares, los autógrafos. Con la apariencia de un campesino, tiene la popularidad de una estrella de rock o un héroe latino del reggaeton.

El pico de su popularidad llegó a fines de 2004. Para entonces, su pintoresca figura había provocado un boom editorial con impronta revisionista. Entre 2002 y 2009 se editaron dos biografías sobre él, otro libro que es una larga entrevista dividida en tópicos y dos recopilaciones de sus frases más ocurrentes, ingeniosas, frívolas y serias. Muy oportunas, las editoriales publicaron libros sobre la historia de los tupamaros, sus sueños frustrados y documentos anquilosados en los sesenta.

En 2005, la moda (eme)pepista llegó al carnaval “más largo del mundo” (en Uruguay dura todo febrero). La murga “joven” más exitosa del país, Agarrate Catalina, le dedicó un cuplé el año que Vázquez asumió como presidente. Algunas de sus estrofas decían: “El Pepe tiene una quinta/un perro y un buzo gris/una moto calandraca/y el pelo de un puerco espín/un fusquita sin bocina/y el orgullo de saber/‘¡que a los votos colorados, yo solo los dupliqué!’/Pepe Mujica, qué jugador/desde el boliche a senador/sueño de muchos y de otros no/la pesadilla que se cumplió”.

Lucía Topolansky dice que a Pepe le ha ido bien porque es llano cuando habla, porque con un lenguaje sencillo dice cosas profundas. En buen romance: el pueblo lo entiende porque él es uno de ellos. Es sincero, “agarra el toro por los cuernos” y cuando de algún tema no sabe, lo admite. Por eso, cree Topolansky, se ganó la confianza de esa entelequia llamada “la gente”.

Mujica dijo alguna vez que “la gente te perdona si te equivocaste de buena fe. Lo que no te perdona es que la jodas y la cagues”.

“El discurso de Pepe tiene un componente filosófico”, afirma su esposa. Y eso que no lee filosofía, poesía ni ficción, prefiere la antropología y la agronomía.

A la izquierda universitaria, urbana y socialista Mujica le mostró que había un interior rural que contenía el adn oriental: su matriz agroexportadora.

En el ministerio de Ganadería charló de tú a tú con un peón rural y con el más encumbrado dirigente de la Asociación Rural del Uruguay. Por eso, opina Topolansky, puede ser un buen presidente.

Sus hinchas —Pepe no tiene simpatizantes, tiene hinchas— lo votarán porque confían en que se encargará de repartir mejor la riqueza y la justicia. Cuando fue Ministro de Ganadería forzó a los empresarios cárnicos para que pusieran en el mercado un corte de asado más accesible para la población de menos recursos. El corte se llamó “el asado del Pepe” y así fue vendido desde los pizarrones de las carnicerías. Otros comerciantes siguieron su idea: rebajaron productos y los bautizaron “del Pepe”.

Para muchos analistas, fue una táctica populista y la llamaron “pobrismo”. El periodista Gustavo Escanlar escribió: “Incomible pero barato. Así es ‘el asado del Pepe’, lo peor que le pasó a la cultura uruguaya en los últimos 20 años. Los productos del Pepe promueven el infraconsumo. Establecen el engaño del ‘liberalismo de la pobreza’: nos hacen libres para consumir cosas de cuarta categoría. El barrio, agradecido”.

Pobrismo o solidaridad con los más débiles, Mujica y su sector, el mpp, crearon a principios de 2006 el Fondo Raúl Sendic, una iniciativa de préstamos a proyectos, en su mayoría cooperativos. Son cesiones de dinero sin cobrar intereses, sin pedir garantías ni preguntarle el partido político, a quienes lo necesiten para salir adelante. El fondo se forma con los excedentes de los salarios de los legisladores, ministros y el intendente capitalino, todos del mpp, que topearon su sueldo en 29 mil pesos a la fecha (1 260 dólares), cuando como senadores ganan 3 500 dólares.

Mujica y Topolansky quisieron predicar con el ejemplo al conformarse con 40% de sus salarios. “Es probable que la enorme cantidad de años de cárcel en los que uno tuvo que vivir con lo mínimo hace que no necesitemos mucho para ser felices, en una sociedad muy consumista, con mucho de superfluo y pseudonecesidades”, argumentó la senadora.

Con los préstamos del “Tupa Bank” pudieron hacer viables más de un centenar de proyectos de albañilería, carpintería, agro, pesca, gastronomía, costurería y servicios varios. El propio Mujica, apelando a la sensibilidad de la izquierda, exhortó a otros sectores del Frente Amplio a que lo imitaran. No tuvo eco.

Tres semanas antes de ganar las internas del 28 de junio, Mujica hizo un alto en su agenda repleta de visitas a pueblitos del interior y recorridas por la capital para quedarse una mañana en su chacra. Mientras la senadora Topolansky hablaba, el presidenciable lidiaba con el tractor.

La entrevista fue pactada con ella porque los encargados de la campaña del Pepe no encontraban horas disponibles. Los tiempos en su chacra eran intocables, dijeron. Por mail, Topolansky explicó qué debía hacer para llegar a la casa, donde piensan seguir viviendo en caso de ser presidente y primera dama: “Tiene que tomar la Ruta 1, pasar los accesos hasta Camino Tomkinson, seguir hasta Camino O’Higgins, que es el único asfaltado a mano derecha. Por O’Higgins, después de que pase el tercer repecho va a ver una carnicería, un almacén y una cooperativa de viviendas; el primer camino a la derecha es Camino Colorado. En la esquina hay una garita de ómnibus que dice Pepe Presidente”.

Un par de ironías deliciosas, pensé: el Camino “Colorado” queda a la derecha y en la garita que dice “Pepe Presidente” había que doblar a la izquierda para llegar a lo de Mujica. Ni que lo hubieran hecho a propósito.

La senadora del mpp contó que conoció a su compañero en la militancia. Ella trabajaba en la agencia financiera Monty, estudiaba en la Facultad de Arquitectura y hacía obras sociales. Así, recolectó fondos para enviar a los trabajadores de caña de azúcar de Artigas, en el norte del país, y se solidarizó con la Revolución Cubana. Cuando en 1969 descubrió que la financiera estafaba a sus clientes, optó por quedarse sin empleo y se enroló, con su información privilegiada, al mln. La operación de los tupamaros fue de un éxito rotundo: revelaron la corrupción reinante, hicieron caer al Ministro de Hacienda y se congraciaron con el pueblo. Ahí Lucía conoció a Pepe. Con el alias de Ana se puso a trabajar en la interna de la organización. Luego fue detenida y enviada a la cárcel de mujeres. Se reencontraron en democracia y decidieron continuar juntos. Ambos organizaron las “mateadas”, llegaron al Parlamento, pensaron el proyecto de escuela agraria en el fondo de la casa. Por las peripecias de la militancia no hubo tiempo para hijos propios.

El año pasado un grupo de vazquistas comenzaron una recolección de firmas para promover una reforma constitucional que habilitara la reelección del presidente actual; Mujica dijo que iba a apoyar la iniciativa, porque le ahorraría dolores de cabeza al partido. “Pero eso no fue posible y empezó a cobrar fuerza lo de Pepe, aunque no estaba en los planes”, confesó Lucía.

“La gente empezó a presionar y se generó un compromiso. No podía fallarle a esos militantes. Hubo una percepción de que si no aceptaba, podía dejar un hueco y dejar tirado a un lote de gente. Después que se ha dicho que sí, hay que jugar la partida hasta las últimas consecuencias”, afirmó la legisladora.

Mujica se levanta a las 6:30 para cebarle mate a su mujer, y en plena campaña ha descuidado su despacho parlamentario para recorrer el país y los programas periodísticos. Cuando viaja al interior a ofrecer discursos hasta la noche, intenta dormir una hora de siesta. En tiempos de campaña, sólo sigue los diarios para ver qué dicen de él. A medio leer en su mesa de luz tiene un libro sobre antropología que se llama El mono que llevamos dentro, una investigación del holandés Frans de Waal sobre las especies anteriores al homo sapiens. No usa celular, no tiene tarjeta de crédito, no escribe él mismo en el blog que ahora muestra su imagen retocada por el Photoshop. Garabatea las ideas de sus columnas cibernéticas en un cuaderno y los encargados de la comunicación del mpp lo suben editado a la página de internet www.pepetalcuales.com.uy

El hogar rural no tiene cuadros importantes, muebles Luis XV ni platería importada; es una casita de clase media empobrecida. En un estante petiso tiene unos 70 libros. El diario del Che en Bolivia, Historia de los orientales de Carlos Machado, La rebelión de Tupac Amaru, de Boleslao Lewin, La economía uruguaya de 1880 a 1965, de Carlos Quijano, El Uruguay del Siglo xx, La economía, Patria en el exilio. Exilio en la patria, de Ernesto Kroch, Deuda externa del Tercer Mundo, de Eric Toussaint y El arte ético de vender mejor, de Alberto Tortorella, son algunos de ellos.

El que aparece por la puerta desvencijada de su propio hogar no es el Pepe peinado con gel, un jopo estético y la cara lisita que se ve en los carteles que promocionan su candidatura. “¡Al Pepe lo bañaron para esa foto!”, bromeó Fernández Huidobro. “Está tan prolijo… Parece que se bañó”, comentó con más sarcasmo que humor el opositor precandidato colorado Luis Hierro en un acto en el interior.

Si Mario Benedetti fue el abuelito bueno, José Mujica es el abuelito gruñón y cascarrabias, que a muchos les cae simpático y a otros tantos les genera rechazo.

Después de tantos años de afirmar que su discurso y su vestimenta no eran impostadas (“Ya conocéis mi torpe aliño indumentario’”, ha dicho, citando a Antonio Machado), Mujica tuvo que reconocer que cedió ante las presiones de los asesores de su campaña y hasta se probó un terno. La foto de Mujica poniéndose el saco estuvo en la agenda informativa del país y hasta fue noticia en el El Nuevo Herald. “Eso sí, no me pongo corbata ni que lo pida Mandrake”.

Este hombre que terminó la secundaria y apenas concurrió a algunas clases universitarias de Letras en la Facultad de Humanidades, cita La Ilíada para recordar que el discurso más esperado no era el de Aquiles o el de Agamenón, sino el del anciano Néstor, que por ser añoso era el más sabio. Sigue ejemplificando con el respeto que se ganó Winston Churchill o el general ruso octogenario que planeó la estrategia para derrotar a Napoleón. “¡Hay ejemplos a patadas de esos en la historia! Ahora, si usted va a pensar que el presidente tiene que ser un atleta… ahí estoy jodido”.

José Mujica puede llegar a ser Presidente de la República Oriental del Uruguay con 74 años, un pasado como guerrillero, “la panza hecha un mapa”, un lenguaje más propio de un campesino que de un mandatario. Es difícil concebir un coctel más pintoresco y curioso en la dirigencia política de este continente.

Hace rato que América del Sur viene evidenciando cambios profundos que despavilaron a los politólogos. El desfile comenzó con un dirigente gremial metalúrgico en Brasil, y siguió con mujeres, indios aymaras, curas y simpatizantes de Montoneros. Por si faltaba algo más excéntrico, asumió un negro en América del Norte. En este contexto, si Pepe Mujica se consagra presidente de los uruguayos, podrá ser el capitán de la selección de “los astrosos”.
Según los analistas políticos, si no logra ganar las elecciones nacionales del 31 de octubre con más de 50% de los votos, tendrá que competir contra el ex presidente blanco Luis Alberto Lacalle —neoliberal, fan de las privatizaciones— en la segunda vuelta de noviembre.

Fernández Huidobro reveló algo: “Antes de dar luz verde a su candidatura, cuando el Pepe dudaba, me dijo: ‘Mirá Ñato, tengo un pasado a cuestas jodido y un problema por mi edad. ¿No debimos haber colgado los botines cuando ganó el Frente hace cinco años? Ahora nos dicen que tenemos que llegar a la Presidencia… ¿Y si perdemos? Vamos a ser los padres de la derrota…”.

Si así fuera, dejará la actividad política para dedicarse a sus flores y hortalizas, como ya anunció en conferencia de prensa. Si pierde, Pepe será plenamente feliz. Podrá ser un chacarero full time.
***
 
CRÓNICA
Publicado en HOY el 22/Julio/2012 | 00:17
La Crónica de Roberto Aguilar / Editor de contenidos
El viernes, el oficialismo fracasó por segunda ocasión en su intento por aprobar el proyecto de Ley de Comunicación. La salida de dos votos que consideraba seguros les amargó la fiesta un viernes.

¿Dónde está la Guillermina? La pregunta atravesó como una exhalación la bancada oficialista de la Asamblea Nacional. La sesión del viernes estaba a punto de comenzar y el bloque de Alianza País se disponía a jugar su última carta para aprobar la ley de Comunicación. Estaban ahí los comodines independientes y socialistas, Herny Cuji y Sheznarda Fernández, la alterna de Gerardo Morán y Rodrigo Collahuazo, Holguer Chávez y Tomás Zevallos… Ahora sólo habría que suspender el orden del día anunciado e instalar la votación que la víspera no pudo ser. Pero… Un momento: ¿y la Guillermina?

Guillermina Cruz, independiente del Napo, figura absolutamente marginal de la Asamblea en condiciones normales, se hacía extrañar por primera vez. Este día le tocó ser el voto 63, el que confiere la mayoría a uno u otro bando. Cuando se supo que se había quedado en su provincia, Alianza País empezó una batalla contra el tiempo y la adversidad que terminaría por perder al cabo de una sesión delirante como se recuerdan pocas.

La víspera ya se habían llevado el chasco de sus vidas cuando los 68 votos que creyeron tener (y que Fernando Cordero anunció el miércoles con exceso de triunfalismo) se les escaparon como arena entre los dedos. Según Lourdes Tibán fue porque era muy temprano, y los bancos no abrían todavía. Hoy la apuesta era mucho más apretada: lograr la mayoría con las justas. La estrategia era simple en apariencia: mientras los negociadores del bloque se lanzaban a conseguir los votos para la ley de Comunicación, cosa que hicieron a vista y paciencia de quien estuviera ahì para entenderlo, el pleno debatiría la de Derechos Laborales. En cuanto tuvieran los 63, Cordero suspendería el debate de la una e instalaría la votación de la otra.

Así transcurrió la mañana sin que los de gobierno lograran su cometido. Sin embargo, para el mediodía un rumor se había adueñado ya del hemiciclo: "la Guillermina está en camino" y, con ella, la mayoría para Alianza País y la consecuente aprobación, de una vez por todas, de la ley de Comunicación. El presidente abrió un receso y convocó a todos para las 15:15. Que el pleno sesione un viernes por la tarde es, de por sì, extraordinario…
Nadie supo a ciencia cierta cómo pasó, el caso es que Guillermina Cruz hizo su entrada triunfal en el recinto parlamentario a las tres y cuarenta de la tarde. Jorge Escala aseguraba a quien quisiera creerle que le mandaron una avioneta. Otros hablaban de un operativo más complejo que incluía un helicóptero y, por supuesto, transporte exprés desde el aeropuerto. Lo cierto es que ahí estaba y todas las miradas convergían en ella.

No estaba dispuesta a entregar tan fácilmente su voto. Como Pedro por su casa se dirigió al estrado de autoridades, subió las tres gradas que conducen al escritorio del Presidente y se sentó a su lado con naturalidad inaudita. En ese momento Alfredo Ortiz exponía su criterio sobre la ley de Derechos Laborales. ¿Alguien en el hemiciclo sabría resumir lo que dijo? Posiblemente ni él mismo. Ahí al frente se estaba decidiendo el futuro de la ley de Comunicación y Andrés Roche hacía aspavientos pidiendo a los fotógrafos que registraran el histórico momento. Fernando Cordero viró su asiento y ambos conversaron durante unos minutos que parecieron eternos.

Ya estaba la oposición celebrando reuniones de último minuto. Betty Amores pasaba de curul en curul susurrando alguna consigna al oído de todo el mundo. Paco Moncayo y Fausto Cobo trabajaban a Vladimir Vargas, ex prianista de corazón verdeagüita. Otros se dirigían a Sheznarda Fernández, voto móvil y fluctuante donde los hay. "Acosada en el pleno, ¡quiero votar ya!", tuiteó ella en cuanto se quedó sola. Mientras tanto, la asambleísta del Napo terminaba su cita en la cumbre y volvía a su curul, el primero de la primera fila.

16:45: habían transcurrido 45 minutos desde su llegada cuando Guillermina Cruz se levantó, tomó su cartera y otros bártulos, se despidió amistosamente de un grupo de oficialistas que formaban alegre corrillo junto a la puerta lateral izquierda del hemiciclo y salió. Ni un solo periodista quedó en el recinto parlamentario. Un tropel de cables, cámaras y trípodes la siguió hasta el parqueadero. Marco Murillo hablaba en ese momento sobre la ley de derechos laborales pero ¿a quién le importa?

Rodeada de micrófonos intentaba abrirse paso doña Guillermina entre los carros. Sin tener claro a dónde ir en medio de la masa de periodistas, deambuló confusamente formando sobre el terreno un dibujo parecido al de los movimientos brownianos de las moscas.

Primera pregunta lanzada a quemarropa: "¿a dónde va?". "A ningún lado, solo vine a conversar con mis compañeros". En efecto, Holguer Chávez y Tomás Zevallos, el socialista que en la anterior votación sobre la ley de Comunicación se viró a último momento a favor del oficialismo, la esperaban en la sombra, sin poder acercársele entre los cables. Cayó la segunda pregunta: "¿usted es el voto clave del gobierno?". "No es cierto, ellos ya tienen 68", mintió. "Pero les tiene nerviosos a todos". "¿Ah sí? Qué iras, ¿no?".
Chávez fue el primero que consiguió agarrarla de los hombros y hablarle al oído, mientras los micrófonos pugnaban sin éxito por grabar la conversación. Luego se le aproximó Tomás Zevallos y repitió idéntica operación. Juntos la llevaron de vuelta al interior del edificio, por la puerta que da al vestíbulo lateral, siempre rodeados por la multitud de periodistas. Trabajosamente caminaron hacia los ascensores. Zevallos llamó, entraron, alguien presionó el botón del piso sexto, las puertas se cerraron dejando afuera cámaras y micrófonos y Guillermina Cruz desapareció para siempre de esta historia. "Nos olvidamos de preguntarle para qué vino", lamentaría más tarde Jean Paul Bardellini, periodista de RTS. Y sí, era la única pregunta con sentido.

Del grupo que subió al sexto piso y que incluía un par asesores sólo regresó, al cabo de quince minutos, Holguer Chávez. Con cara de acontecido caminó al escritorio de Fernando Cordero y le susurró las malas noticias al oído. El voto número 63 del oficialismo se encontraba ya de regreso a la provincia del Napo.

El golpe de gracia lo dio Sheznarda Fernández, que se fue poco antes de las cinco de la tarde entre un alboroto de aplausos, gritos y carcajadas lanzadas a mandíbula batiente por el bloque de oposición, que estallaba en auténtica catarsis. La salida de Fernández fue el apoteósico final de la sesión. Enrique Herrería le lanzó un beso volado digno de comedia; Fausto Cobo le abrió paso con movimientos bufonescos que arrancaron vivas y otras exclamaciones de algarabía de los suyos y luego fue a sentarse en su curul (el de ella). Allí, ante la mirada incrédula de los oficialistas derrotados, se puso a parodiarla cómicamente con el celular en la mano.

La farsa del debate sobre los derechos laborales no tenía razón de continuar. Entre gritos de "y llora Corcho llora", Fernando Cordero dio por concluida la sesión y se felicitó de tener a todos sesionando un día viernes. "Ya encontré la fórmula –dijo- de hacerles trabajar". ¿Y cuál es? Amenazarles con votar la Ley de comunicación de un momento a otro. ¿Quién se atreve a faltar?

"Vamos a votar cuando tengamos los votos". La confesión final de Gina Godoy es un premio consuelo que el oficialismo, a estas alturas del partido, está cada vez más lejos de cobrar. Paco Velasco lo puso con más gracia: "camarón que se duerme se lo lleva la ley de Comunicación". Todavía a último momento, mientras caminaba hacia la puerta de salida, los periodistas obtuvieron de él una perla para la historia: "esto -dijo- fue una verdadera orgipiñata". Queda sentado.

martes, 6 de noviembre de 2012

¿POR QUÉ CORREA BUSCA APOYO DE LOS ‘IMPERIALISTAS’ PARA YACHAY?

¿Qué hay detrás del proyecto ‘Ciudad del Conocimiento Yachay’ para que un presidente de la república de ‘izquierda’,‘revolucionario’, fuera corriendo personalmente al ‘imperio’ a observar un‘proyecto imperialista’ financiado por un ‘magnate imperialista’?

¿Cuán importante es Yachay que a su alrededor ya están moviéndose los ‘imperios’? Conozco que ya hay ofertas de financiamiento de la China, del Japón y como van las cosas, se uniría la corporación del millonario ‘gringo’ David H. Murdock que financia el Campus de Investigación de Carolina de Norte, EE.UU. (NCRC por sus siglas en inglés), donde se investigan los valores médicos de las plantas medicinales.

El mensaje es claro: Correa quiere usar este proyecto políticamente, primero, para presentarse al mundo como un ‘ecologista’,y segundo, para tratar de convencer a los indígenas de que es un ‘ecologista’ defensor de su cultura, no un depredador minero, como le identifican. Y debe pensar que con esta idea ganará sus votos.

Pero el gobierno no ha dicho ni sola una palabra sobre los riesgos de poner en manos de los‘imperios’ un proyecto de esta naturaleza. Se les entregaría la valiosa flora medicinal ecuatoriana. Eso sería peor que la entrega de la Base de Manta. El gobierno no ha mencionado las medidas de seguridad que tomaría para defender la propiedad de las plantas medicinales y sus derivados, porque lo que está pasando alrededor del mundo, es terrible, como pueden verlo en las siguientes ‘ayudamemorias’ que refieren casos increíbles de biopiratería.

AYUDAMEMORIA

*RESPONSABILIDAD EN LA UTILIZACIÓN DE LOS RECURSOS GENÉTICOS

Cristina Alvarez Baquerizo (España)

La legislación interna de los EE.UU. ya permitía patentar seres vivos o sus partes antes del cambio en el plano internacional… (Ej.) La compañía Monsanto tiene patentada una soja genéticamente modificada que informa información genética que le hace resistente a su herbicida Roundup Ready. Al poder considerarse ‘dueña’ de dicha soja, la compañía hace firmar un contrato a los agricultores que deseen cultivarla, en el que, entre otras cosas, se comprometen a no guardar semillas para el cultivo de la campaña posterior. La compañía cuenta con su propio cuerpo de inspectores… e incluso a iniciado procesos legales contra los agricultores que parecen haber guardado la semilla. Las implicaciones de dependencia del agricultor hacia una sola o unas pocas casas comerciales son evidentes.

El caso de la sangre de drago

La sangre de drago es una planta medicinal conocida y utilizada desde hace mucho tiempo a lo largo de toda la región amazónica para múltiples utilidades. Shaman Pharmaceuticals, compañía norteamericana con un largo historial en bioprospecciones ha conseguido una patente sobre dos productos derivados de la planta (Patentes US 5.211.944 y US 5.202.348) reconoce haber ingresado unos cien millones de dólares anuales desde la puesta en el mercado de los productos producidos a partir de las patentes. Ha compensado a la comunidad de Jatum Molino poblada por indígenas quechuas (Ecuador) del siguiente modo:

-Abril 1992: 1.500 dólares cedidos a la comunidad, además de asistencia técnica para ampliar el aeropuerto comunal. Jatum Molino está a dos días de canoa de la ciudad más cercana y a una hora en avioneta. Los técnicos de Shaman Pharmaceuticals entraron en la comunidad en octubre de 1992 para una estancia de dos años, de modo que el aeropuerto les era imprescindible.

-Octubre 1982: Una vaca grande para alimentar a la Comunidad y al equipo de Sh. P. Un botiquín básico. Salarios pagados a las treinta personas que trabajaron algunos meses en la recolección y manipulación de la planta.

-Enero 1993: Visitas odontológicas para toda la comunidad.

Desde entonces, pagan un salario al shaman de la comunidad y su aprendiz.

El caso de la Uña de Gato

En Perú, la Compañía Liofilizadora del Pacífico ha iniciado la comercialización bajo patente de la Uña de Gato (Uncaria Tomentosa) un bejuco amazónico usado contra la artritis, el reumatismo y la diabetes que ha demostrado poseer propiedades para la recomposición celular y para reforzar el sistema inmunológico. La empresa comercializadora estima mantener sus ventas en los actuales 25 millones de dólares anuales. De esta cantidad 60 mil dólares van a ir a las comunidades shaninkas que viven en el área y han usado hace siglos esa planta, pero el pago no será en concepto de propiedad intelectual sino para pagar los trabajos de recogida (El Comercio de Lima, 25 de febrero, 1996).

Actos III-IV-V Simposio Internacional Legislacion y Derecho Ambiental.
Ilustre Colegio de Abogados de Madrid.
1995-Programa Iberoamericano en Derecho Ambiental-2005
Páginas 80-81-82.
Fuente: http://books.google.com.ec/books?id=iVucdI5zeCEC&pg=PA81&lpg=PA81&dq=patentada+sangre+de&source=bl&ots=n5aTzljSia&sig=NrEAJfN8ZMaakVxGQ3_7obRWEcQ&hl=es-419&sa=X&ei=9jiVUMr0G4T48wSw5IDoDQ&sqi=2&ved=0CFMQ6AEwCQ#v=onepage&q=patentada%20sangre%20de&f=false

*NATURISTA ECUATORIANO DANIEL FLORES DESCUBRIÓ LA SANGRE DE DRAGO

“Quien descubrió las virtudes curativas de la Sangre de drago fui yo, hace 40 y pico de años. Me quemé con gasolina la mitad de mi cuerpo. Mis quemaduras fueron gravísimas. Me puse la Sangre de drago y mi piel no quedó dañada, solo perdió su color normal y en las zonas de las quemaduras quedaron unas pecas”. Efectivamente, la piel de Flores no tiene las huellas de una quemadura de alto grado. Muestra una coloración blanquecina, parecida a la original, como si se hubiese quemado en la playa. Desde entonces ha recomendadola Sangre de drago para toda quemadura. “Yo he curado quemaduras gravísimas diciéndole a la gente que use la sangre de drago porque es secante, desinfectante y cicatrizante. No hay remedio más eficaz en el mundo para curar las quemaduras que la Sangrede drago. Por eso se llevan a Alemania montones de Sangre de drago y al señor Miller se le ocurrió patentar un descubrimiento mío, la Sangre de drago, como cosa suya. También ha patentado vegetales que son nuestros como la Guayusa, la Ayahuasca, con fines monopólicos. Yo considero eso inmoral y las autoridades norteamericanas deberían desechar estas cosas y sancionar a quienes lo hagan porque sino, a mí se me va a ocurrir en uno de estos días patentar el agua del Océano Pacífico y no les voy a dejar navegar a los norteamericanos si no me pagan. Los vegetales son patrimonio de la humanidad…”

Libro ‘El hombre que cura el cáncer’, de Mariana Neira y Hugo Luzuriaga, pág. 79

*AYAHUASCA PATENTADA
Comunicado de prensa:

La Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA) ha tomado conocimiento de que en los Estados Unidos ha sido patentada bajo el número 5.751 la fórmula para la elaboración de la 'ayahuasca' o yagé, un compuesto del bejuco banisteriopsis caapi que es utilizada por nuestros pueblos con fines rituales. El uso del yagé se extiende prácticamente por toda la Cuenca Amazónica entre centenares de pueblos indígenas. Esto ha sido documentado en centenares de libros, prácticamente desde la llegada de los colonizadores españoles y portugueses y de los misioneros que desde el siglo XVI se internaron en la selva amazónica.

Esta bebida es un ingrediente fundamental de las ceremonias religiosas y de curación para nuestra gente, y su utilización con fines comerciales es un verdadero insulto para las más de cuatrocientas culturas que pueblan la Cuenca Amazónica. Nos preguntamos: ¿Qué pasaría si un indígena amazónico intentara patentar la hostia y el vino que utilizan los ritos católicos, o la purificación kosher para los alimentos de los creyentes judíos?

Estamos seguros desde ya que lo tomarían por loco, no le aceptarían su solicitud, y habría un escándalo mundial que evitaría esta herejía. ¿Por qué entonces, no se respetan de la misma manera los elementos nuestros ritos sagrados?

Quien ha tenido la osadía de patentar este ancestral conocimiento es el señor Loren Miller, dueño de una empresa de biopiratería denominada "International Plant Medicine Corporation", un viejo conocido de los pueblos indígenas: en julio de 1995 la COICA realizó una campaña nacional e internacional para evitar que 'él y un equipo de camarógrafos y "científicos" con respaldo militar entren en la selva ecuatoriana para contactar y filmar al pueblo tagaeri, un grupo de unos 60 indígenas que resolvieron no tener contacto alguno con la cultura occidental.

La campaña produjo el efecto esperado y este traficante de las culturas indígenas debió abandonar el proyecto por presión de organizaciones indígenas, conservacionistas y de la misma cadena CNN a la que pretendía vender su documental.

El Consejo de Coordinación de la COICA declara al señor Loren Miller enemigo de los pueblos indígenas en los nueve países de la Cuenca Amazónica y se prohíbe su entrada y la de cualquier funcionario o técnico de la International Plant Medicine Corporation a cualquier comunidad indígena amazónica, y no se hace responsable por las consecuencias que para su integridad física pueda tener el desconocimiento de esta resolución.

La COICA alerta a todos los pueblos indígenas sobre las actividades de esta empresa y de todas las que -con el pretexto de encontrar curas para graves enfermedades- se apropian de las plantas y el conocimiento tradicional de nuestros pueblos. Así mismo, intensificará su campaña internacional para lograr el reconocimiento de los derechos de propiedad intelectual de los pueblos indígenas.

La COICA hace un llamado a los gobiernos nacionales de la Región para que públicamente se desconozca esta pretensión de apropiarse de un conocimiento que es patrimonio indígena y por lo tanto de la cultura de cada uno de los nueve países amazónicos y espera de ellos una respuesta contundente, so pena de que este acto de piratería se extienda a otros campos de la cultura, la ciencia y la técnica de los países subdesarrollados.

Finalmente, la COICA, en carta dirigida al presidente Bill CLinton, hará una solicitud al gobierno de los Estado Unidos para que revea el otorgamiento de esta patente que -lo decimos una vez más- es un verdadero insulto no solo para la cultura de nuestros pueblos, sino para la misma inteligencia de toda la Humanidad.

Quito, 24 de junio de 1996
Valerio Grefa
Coordinador General



sábado, 3 de noviembre de 2012

Los 'Felipillos'

A propósito de la expulsión de la CONAIE de Auqui Tituaña por aceptar ser candidato a vicepresidente con el banquero Guillermo Lasso, viene bien esta nota escrita por Ricardo Ulcuango quien fuera expulsado de la Ecuarunari (agosto 2011) por aceptar servir a Correa como embajador en Bolivia. Él explica qué es un 'Felipillo'.

AYUDAMEMORIA (TEXTUAL)

LA RESISTENCIA INDIGENA EN EL TAHUANTINSUYO
...
En 1532 se da el encuentro entre el gran Inca Atahualpa y el conquistador Pizarro, hay regalos y luego la traición por la extrema codicia, la prisión del Inca y su muerte al igual que en México. Para este efecto, queremos rescatar la narración hecha por Felipe Guamán Poma de Ayala, quechua de puro linaje, quien escribió "La crónica y Buen Gobierno": Pizarro estaba acompañado del fraile Vicente Valverde y mil hombres. Atahualpa va a Cajamarca con cien mil personas; los españoles ya habían tomado los lugares altos y estratégicos de la plaza, el diálogo se da mediante un traductor indígena de Guancabilca llamado Felipe y que estaba al servicio de los españoles (desde allí se llamarán los traidores "felipillos"). Pizarro le dirá que viene como mensajero y embajador de un gran señor y que fuera su amigo. Atahualpa le responde que él también era un gran señor en su reino.

Después el sacerdote Vicente Valverde, llevando en la mano derecha una cruz y en la izquierda la Biblia y le dice que él también es embajador y mensajero de otro señor gran amigo de Dios y que fuese su Amigo y que adorase la cruz y creyese en el evangelio que es verdadero y todo lo demás es burla. El Inca responde que no tiene que adorar a nada sino al Sol que nunca muere, ni sus guacas y dioses; luego preguntó al sacerdote quién lo había dicho y él dice que en el evangelio estaba escrito y le muestra el libro. El Inca le pide el libro y como no le dijo nada, no le habló a él, lo arrojo de las manos. El sacerdote inmediatamente dijo: "Acudan aquí caballeros, estos indios gentiles están contra nuestra fe" y Don Francisco Pizarro y Diego de Almagro, a su vez, ordenaron y dijeron: "Ataquen caballeros estos infieles están contra nuestra cristiana y nuestro emperador y rey; ataquémoslo".

Narra Guamán Poma que empezaron a disparar y mataron indios como hormigas, aprehendieron a Atahualpa. Para lograr su rescate trajeron de los cuatro caminos del imperio grandes cantidades de oro y plata para saciar la voracidad de los conquistadores, botín que se repartieron en nombre de su "Dios" Posteriormente asesinaron al soberano, con un torniquete de hierro, luego de bautizarle y ponerle el nombre de Francisco.

Esto sucede en la tarde del sábado 26 de Julio de 1533. Atahualpa acepta el bautizo para morir quemado, ya que de acuerdo a su doctrina inculcada por sus amautas y sacerdotes, si su cuerpo era quemado en el fuego, su alma moriría y no podría renacer en el futuro a una nueva vida, como lo certifica Cieza de León: "Dicen algunos que algunos de los indios Atabalipa dijo antes que lo matasen que le aguardasen en Quito, que allá le volverían a ver". De aquí surge la leyenda del "INKARRI", que habla sobre el regreso de Atahualpa para restablecer la era feliz anterior a la llegada de los españoles. Atahualpa prefirió entregar si es posible todo el oro y la plata del reino antes que entregar la dignidad de su pueblo, antes que entregar la libre determinación en manos de extraños; en otras palabras LO AESINARON POR SER INCORRUPTIBLE…


 

miércoles, 17 de octubre de 2012

Los primos Delgado

No ha participado un solo primo Delgado dentro de este gobierno, hay varios primos Delgado desde el 2007. Algunos de ellos ya fueron involucrados en otro acto -supuestamente irregular- en el Pacific National Bank, en Miami, denunciado por el Miami Herald que poco se difundió en el país y ninguna autoridad ecuatoriana investigó.

Veamos en esta AYUDAMEMORIA:

* NEPOTISMO EN GOBIERNO DE RAFAEL CORREA

Thursday, September 13, 2007
Noticia en El Universo: Vínculos familiares se repiten en el Ejecutivo

Madres, hermanos, primos, suegros, hijos... Gobernar en familia ha sido una práctica tradicional en el país que, aunque cuestionada, no resulta ajena para el régimen de Rafael Correa, pese a que el Mandatario ha criticado este “hábito”.
Él tiene a primos entre sus colaboradores, como Cassia Delgado, su prima en segundo grado y secretaria personal.
...
El propio Jefe de Estado tiene a familiares entre sus más cercanos colaboradores, aunque él mismo expresó que Pierina y Fabricio, sus hermanos mayores, no trabajarán en el Gobierno para no caer en nepotismo.Sus primos, sin embargo, sí tienen participación. Cassia Delgado Granizo, por ejemplo, es su asistente personal; siempre está con él en Carondelet.
...
Una prima más de Correa, Loira Delgado Granizo, hermana de Cassia, fue nombrada gerenta de Turismo del Litoral. Otro primo, Rafael Avilés (hijo de una prima de Correa), estuvo temporalmente en la Secretaría de Comunicación, en Guayaquil, pero no firmó contrato.
Otro caso. Pedro Delgado Campaña, primo de Correa, asesora –vía electrónica desde Miami– a los miembros de la JB afines al Gobierno. Correa justificó esta guía al señalar, en junio, que es un “especialista financiero que no ha cobrado dos reales”.
Joaquín Chiriboga Correa, su tío en segundo grado, fue posesionado el 19 de marzo como delegado de Cedegé ante el directorio de la empresa Aguas de la Península (Aguapen), pero se lo “suspendió” en julio último.

* DEMANDAN A BANCO DE ECUADOR POR ANOMALÍAS

Miami Herald
Publicado el martes, 06.09.09
GERARDO REYES
greyes@elnuevoherald.com

El presidente del Pacific National Bank N.A (PNB) en Miami, propiedad del estado del Ecuador, cerró el año pasado una cuenta de la entonces secretaria privada del presidente de ese país, Rafael Correa, por cuanto supuestamente movía una cantidad de dinero que no correspondía a sus ingresos y la funcionaria se negó a explicar el origen de los fondos, según documentos judiciales.

El hoy ex ejecutivo del banco, Carl Wolf, planteó la presunta irregularidad en una demanda civil radicada el lunes en la corte federal de Miami en la que alega que fue separado de su cargo injustamente por tomar ésta y otras decisiones.

Wolf afirma que también pesó en la determinación en su contra el haberse negado a contratar a una persona con problemas legales y haber rechazado la propuesta de pagarle al presidente del Banco del Pacífico del Ecuador (BPE) un sobresueldo por "debajo de la mesa''.

El abogado del PNB en Miami, Mark Raymond, restó importancia a la demanda y advirtió que ya había sido rechazada en una corte estatal. "Ya una jueza muy preparada estudió cada uno de los alegatos y no encontró mérito, no cabe una acción contra el banco'', dijo Raymond. "El señor Wolf ya fracasó en probar los méritos y ahora presenta la misma demanda ante un juez federal, yo espero que se la vuelvan a rechazar''.

Según la demanda, Wolf ordenó el cierre entre el 2007 y el 2008 de 4,600 de las 11,000 cuentas del banco en Estados Unidos debido a que no cumplían con las regulaciones contra el lavado de activos. Wolf sostuvo que recibió presiones de Pedro Delgado Campana, miembro de la junta directiva del Banco Central del Ecuador y pariente de Correa, para poner en marcha un plan que incluía la reapertura de las cuentas.

Si este plan no se cumplía, alega la querella, "la gerencia de Miami sería despedida''.

Raymond dijo que los puntos planteados por Delgado no fueron entendidos por Wolf porque estaban en español y el ejecutivo no domina ese idioma.

De acuerdo con la demanda, entre las cuentas cerradas se encontraba la de Cassia Delgado, identificada como sobrina de Correa y quien fue su secretaria privada entre el 2007 y el 2008.

"Grandes cantidades de dinero fueron transferidas desde y hacia la cuenta de Cassia Delgado'', asegura la demanda, aunque no señala nada concluyente sobre el origen o destino de esos fondos.

Gary Costales, abogado de Wolf, explicó en la demanda que su cliente tomó la decisión de cerrar la cuenta "porque los depósitos eran sospechosos, dado que excedían notoriamente los ingresos reportados por Delgado y Delgado se negó a reportar el origen de los fondos''.

Delgado, quien explicó que es prima segunda y no sobrina del presidente, calificó las acusaciones de "maliciosas'' en una entrevista con El Nuevo Herald.

"Tengo como demostrar legalmente los ingresos que yo percibo porque vivo de mi trabajo, eso es demasiado malicioso'', afirmó Delgado.

Agregó que sus depósitos no pasaron de $52,000 aunque admitió que la cuenta fue cerrada porque no pudo responder las solicitudes de explicaciones del banco ya que la correspondencia llegaba a una dirección donde no estaba viviendo.

Una vez enterada, ofreció amplias explicaciones a un oficial de cuentas del banco, agregó.

"No puede ser posible que se trate de dañar la imagen personal y la del presidente de esa manera'', comentó Delgado

El lunes El Nuevo Herald hizo varias llamadas a la subsecretaria de prensa de la presidencia ecuatoriana, Carolina Espinosa, pero no fueron respondidas.

El Pacific National Bank NA (no tiene relación con el banco del mismo nombre en California) es subsidiario del Banco del Pacífico del Ecuador (BPE), que a su vez es propiedad del Banco Central del Ecuador.

Wolf, quien fue contratado como vicepresidente del banco en el 2005 y ascendido a presidente en el 2007, reportaba a Andrés Baquerizo, presidente del BPE desde enero del 2008. De acuerdo con la demanda, Baquerizo se aprovechó de su poder para hacer pedidos ilegales a Wolf, como contratar a Wilfredo Villacís Guillén, "un delincuente condenado, requerido en Ecuador en ese momento por enriquecimiento con dineros públicos''.

Baquerizo le dijo a Wolf que estaba bajo una gran presión de funcionarios del gobierno ecuatoriano para que el banco contratara a Villacís, pero que él sólo era un "mensajero'', señaló la querella.

De acuerdo con la demanda, dos abogados que consultó Wolf recomendaron no contratar a Villacís.

Afirma el abogado Costales que Baquerizo le pidió a Wolf el pago subrepticio de $8,000 de sobresueldo a través de un contratista del banco. Con esa maniobra, Baquerizo pretendía eludir la regulación que prohíbe devengar un salario más alto que el del presidente del Ecuador, aseguró la demanda.

Debido a sus negativas y protestas, alegó Wolf, en mayo del 2008, Antonio Prada, presidente de la junta directiva del PNB, le pidió la renuncia. De acuerdo con Raymond, Wolf fue despedido ‘‘porque no estaba haciendo su trabajo''.

El abogado de Wolf dijo que la demanda fue rechazada en una corte estatal no por falta de méritos sino por tecnicismos.

 

jueves, 27 de septiembre de 2012

‘Guerra sicológica’ idéntica a la del gobierno socialcristiano

Las amenazas a los periodistas de ahora, en el gobierno de la ‘revolución ciudadana’ son idénticas a aquellas que la familia Restrepo recibía en el gobierno socialcristiano de Febres Cordero cuando buscaba a Santiago y Andrés, de 17 y 14 años, desaparecidos y asesinados por fuerzas de seguridad de ese gobierno, según descubrió la Comisión Internacional. El gobierno socialcristiano usó la ‘guerra sicológica’ para tratar de impedir que la familia buscara a los chicos, ahora se usa la ‘guerra sicológica’ para tratar de evitar que los periodistas investiguen.

Ayudamemoria:

Desacreditan a las víctimas
“El 25 de enero Morán fue al colegio de Andrés para decirles a sus compañeros que no valía la pena reclamar por él y su hermano, porque eran unos drogadictos, alcohólicos y mujeriegos.”

Amenazan a las víctimas por teléfono
“Mientras Morán y Argoti decían que investigaban, los Restrepo y sus amigos vivían hechos extraños.
-Ingeniero, me han dicho que se va del país y que está vendiendo todo. ¿Cuánto vale su casa, cuánto sus almacenes de El Bosque?
-No me voy ni están en venta –contestó Pedro Restrepo.
El teléfono fue usado como arma para múltiples amenazas. Incluso la pequeña María Fernanda Restrepo fue una víctima.
Un anónimo llamó a Titi Cruz, una joven amiga de la familia.
-¿Quién eres?
-Soy Titi Cruz.
-Tú no eres Titi Cruz, eres la chica Restrepo y vas a morir.”

Persiguen personalmente a las víctimas
“El teniente coronel Elías Federico Mera Cevallos… había asumido esa jefatura (del SIC-P) en septiembre de 1988 y por la trascendencia nacional e internacional que adquirió el caso, dispuso que el teniente Miguel Angel Chiriboga Hurtado, jefe de la Brigada de Menores, y el agente Luis Sampedro, elaboraron un informe relámpago.
Chiriboga y el teniente Edmundo Mera Hernández, fueron identificados por Luz Helena (la madre de Santiago y Andrés) como los hombres que tiempo atrás la habían perseguido desde tempranas horas de la mañana por todas las iglesias a donde iba a orar.”
Libro ‘Caso Restrepo, Crimen de Estado’, de Mariana Neira, Editorial Eskeletra. Páginas 37, 41, 105.

martes, 25 de septiembre de 2012

Correazos a los desprotegidos, regalos a los amigos

Al futbolista ecuatoriano ‘Sombra’ Espinosa, el SRI le mandó a la cárcel por una deuda de 52 mil dólares, al siniestro argentino Duzac que se llevó 800 mil de COFIEC con garantías de bienes del Estado ecuatoriano, sus poderosos protectores no le encuentran.
Véalo en esta Ayudamemoria:

‘SOMBRA’ A LA CÁRCEL POR 52 MIL

“Los pendientes tributarios que mantienen los clubes y varios jugadores con el SRI tomaron relevancia por la detención de Giovanny Espinoza, el miércoles (19 septiembre).
Ese día, el defensa de Deportivo Quito fue aprehendido por la Policía Judicial en el aeropuerto, a su arribo de Cochabamba, Bolivia.
A esa ciudad viajó el pasado 16 de septiembre, violando una orden de prohibición de salida del país, impuesta el 13 de agosto, a raíz de una deuda con el SRI. La ‘Sombra’, como apodan al ex seleccionado, tiene un juicio coactivo por USD 51 980,30.
El caso trascendió por ser una figura pública, según Paola Hidalgo, directora de la Regional Norte del Servicio de Rentas Internas, ya que ese es solo uno de los 2 301 procesos de juicios coactivos que el SRI inició este año…
En el caso de Espinoza, el SRI espera que después de obtener la libertad por el tema de desacato –al salir del país– la ‘Sombra’ se acerque a las oficinas para saldar la deuda. Solo allí terminará el juicio en su contra.
Hasta el momento, el SRI no ha podido embargarle ningún bien mueble o inmueble a Espinoza, ya que según el Registro de la Propiedad no registra nada a su nombre. Tampoco cuentas bancarias…”
Diario El Comercio, domingo 23 septiembre 2012. Página 28.

DUZAC SE FUE CON 800 MIL Y NO PASA NADA

“La entrega de créditos en el Banco Cofiec, cuyo principal accionista es el Estado, a través de la Unidad de Gestión de Derecho Público (Ugedep), mantiene a la entidad en una situación complicada.
El primer crédito por USD 800 000 se dio en tiempo récord, del 2 al 7 de diciembre del 2011, al ciudadano argentino Gastón Duzac, y actualmente está impago….
En la demanda civil no consta el domicilio de Duzac, de 37 años, y se desconoce su paradero. Este ciudadano ha mantenido relaciones cercanas con Pedro Delgado, presidente del Directorio del Banco Central y representante legal de la Ugedep; y el cuñado de Delgado, Francisco Endara.
Además, fue parte de la comitiva oficial, liderada por Delgado, que viajó a Rusia e Irán, del 14 al 21 de febrero pasado, con la autorización de la Presidencia.
Inicialmente, este crédito estuvo respaldado con garantías no ejecutables, como los certificados de depósito de Seguros Rocafuerte y una propiedad incautada por el Estado a los ex dueños del extinto Filanbanco. El respaldo temporal fue aceptado por el banco hasta que Duzac recibiera un bien de Maxigraf, también estatal.
Luego se entregó como garantía la maquinaria de la Agrícola Las Mercedes, también incautada por el Gobierno, y de una producción futura de palma africana, que cubriría el 250% del crédito.
Está previsto que la obligación sea cancelada hasta el 15 de este mes (septiembre), de lo contrario se analiza la ejecución de las garantías por USD 1,2 millones”.
El Comercio. Unidad de InvestigaciónViernes 14/09/2012

lunes, 17 de septiembre de 2012

Ayudamemoria: Cómo capturaron a Simón Trinidad en Quito


Captura de 'Simón Trinidad' fue posible gracias a la información de un ex militante de las Farc

El Tiempo (Colombia). Enero 4 de 2004

 

El informante obtendrá una recompensa de un poco más de 800 mil dólares, dijo a EL TIEMPO una alta fuente que participó en la cacería del guerrillero.

Se trata de un hombre que tras militar en la subversión, decidió abandonar sus filas y reinsertarse en junio del 2003, para ganarse ahora la millonaria recompensa que el gobierno colombiano ofrece por cualquiera de los jefes máximos de las Farc, el Eln o los paramilitares.

Su delación, ocurrida hace unas pocas semanas, ayudó a atar los cabos que venían siendo descubiertos por inteligencia del Ejército, desde agosto del 2003, cuando el propio presidente Álvaro Uribe les había puesto la tarea de hurgar en Quito.

Por esas fechas, el mandatario había estado de visita en la capital ecuatoriana y varias personas le pidieron audiencia para contarle que líderes de las Farc estaban convirtiendo la capital ecuatoriana en sede de reuniones.

Durante los cerca de seis meses de pesquisas, lideradas por el Ejército, otras agencias colombianas, como la inteligencia de la Policía, el CTI de la Fiscalía, e inclusive el Servicio de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) y la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de ese país, apoyaron la investigación.

Sin embargo, los datos recogidos aún no eran tan contundentes, hasta cuando apareció el informante y les contó detalles de cómo se movían en Ecuador y Colombia Juvenal Ovidio Ricardo Palmera, 'Simón Trinidad'; otros cinco jefes del estado mayor y del secretariado de las Farc, al igual que amigos y familiares.

También les relató pormenores de las dolencias físicas que padece el guerrillero, los medicamentos que usa y los nombres de los centros médicos de Quito donde, bajo nombre falso, recibía atención, datos que resultaron esenciales para dar con su paradero.

En el monte

Uno de los datos clave que suministró el informante fue cómo a comienzos del año pasado la cúpula de las Farc le ordenó al frente primero de esa organización cuidar en sus campamentos a 'Trinidad' mientras este se recuperaba de unas graves dolencias, al parecer producidas por un cáncer de próstata o de testículo.

El frente primero o 'Armando Ríos' es considerado uno de los más ricos y organizados. Tiene gran influencia en el Guaviare, zona a la que llegó en los años 80, y prácticamente domina los corredores entre Calamar, Miraflores y El Retorno, donde controla el negocio de la cocaína. Es el responsable de la toma de Mitú (Vaupés), donde murieron 35 policías y secuestraron a otros 65.

En esta región, el frente primero construyó grandes centros de descanso y vacacionales -algunos desmantelados en el 2002 por el Ejército-, donde los informes de inteligencia dan cuenta de que en los meses recientes se refugiaba 'Simón Trinidad'.

Luego, a finales de septiembre, una nueva interceptación electrónica confirmó que guerrilleros de ese frente buscaban afanosamente unos medicamentos para 'Trinidad', entre ellos uno para el sistema urinario.

De allí, revela la investigación, 'Trinidad' viajaba esporádicamente a Putumayo, casi siempre protegido por al menos una docena de hombres vestidos de civil. Desde entonces, por lo menos 15 oficiales de las distintas fuerzas se trasladaron a los cascos urbanos de la zona en busca de su rastro.

El 16 de diciembre, inteligencia del Ejército estableció que el jefe guerrillero había salido de Puerto Ospina, en el Putumayo, rumbo a Quito, en compañía de una compañera sentimental. Ingresó, según lo registra la Tarjeta Andina de Migración de Ecuador, con el nombre de Juan Alberto Rodríguez González, con cédula 19'715.420.

Según la tarjeta, había nacido el 2 de septiembre de 1950 y no el 30 de julio del mismo año, cuando efectivamente nació el subversivo, que desde 1987 milita en las Farc.

Por esos mismos días, los investigadores también conocieron que la hija de la compañera de 'Trinidad' -una adolescente de 13 años- había ingresado a Guayaquil en septiembre y que desde allí se había trasladado a Quito a reunirse con su mamá.

La casa

El punto de encuentro era una modesta casa ubicada en una zona popular de Quito, que por temporadas albergaba a familiares y testaferros de otros jefes subversivos.

Los seguimientos -que quedaron registrados en videos como los que ayer reveló Inteligencia del Ejército- mostraban a 'Trinidad' caminando por las calles de Quito, a veces en compañía de las dos mujeres, y en otras ocasiones, completamente solo.

Siempre cubría su cabeza con una gorra negra, usaba gafas de marco negro y en ocasiones vestía de corbata o cubría su cuello con una bufanda. En varias oportunidades se le vio cargando paquetes de mercado.

¿Por qué no lo capturaron en ese momento? Inteligencia tenía información de que otros jefes guerrilleros se estaban moviendo por otros países para hacer escala luego en Quito y de allí dirigirse a una cumbre secreta en Manaos (Brasil). La idea, entonces, era esperar y capturar la mayor cantidad posible de jefes guerrilleros.

Mientras tanto, los hombres de inteligencia realizaban fiestas y asados en la vecindad de 'Trinidad' para no perder su rastro. Inclusive, lo siguieron hasta la clínica Eugenio Espejo, donde le efectuaron un examen de próstata, y hasta la oficina donde le entregaron cédula y pasaporte ecuatorianos a nombre de Cristo Rey Mariscal Peralta.

Tan cerca estuvieron de él que en una oportunidad esperaron en una mesa contigua a la suya, en la pollería Texas Company, donde 'Trinidad' se tomó una gaseosa, para luego coger el vaso y llevarlo a un laboratorio de criminalística y cotejar sus huellas dactilares.

La espera culminó el pasado viernes cuando los oficiales, tanto del Ejército como de la Policía, conocieron que ningún otro jefe guerrillero iba a ir a Quito y que, por el contrario, 'Trinidad' se aprestaba a abandonar tierra ecuatoriana.

'Simón Trinidad' fue capturado a las 10 de la noche en la avenida Amazonas, por la Policía ecuatoriana, cuyo portavoz, Manuel Sarmiento, reiteró ayer que la detención no obedeció a ninguna operación de seguimiento sino a una acción rutinaria de registro migratorio. "Si hubo un seguimiento por parte de Colombia, eso no llevó a su detención... No podemos alterar la verdad", le dijo a la agencia de noticias AFP.

El guerrillero se identificó inicialmente como Cristo Rey Mariscal Peralta, pero 15 minutos más tarde, en la jefatura policial más cercana, admitió ser 'Simón Trinidad'. Aseguró que estaba en gestiones diplomáticas a nombre de las Farc y que solicitaría asilo político porque su vida corría peligro en Colombia.

Pero su suerte estaba echada. Dieciocho horas más tarde ingresaba a un calabozo del 'búnker' de la Fiscalía en Bogotá, donde ayer comenzó a rendir indagatoria por 59 registros judiciales en su contra.

 

Presidente negó versión sobre la captura de ‘Simón Trinidad’

El Universo. Jueves 18 de marzo del 2004

EFE-AP | BOGOTÁ

 

El presidente de Ecuador, Lucio Gutiérrez, aseguró ayer en esta ciudad que en la detención de Ricardo Palmera, alias Simón Trinidad, líder guerrillero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en enero pasado, solo participaron fuerzas policiales de su país.

Gutiérrez respondió así a una declaración escrita difundida en esta ciudad por el semanario Voz, en la que Simón Trinidad señaló que en su detención participaron “militares colombianos y agentes gringos (de EE.UU.)”.

El mandatario ecuatoriano hizo esta declaración tras recibir un título Honoris Causa en Administración de Empresas, conferido por la Universidad Militar Nueva Granada, de Bogotá.

En su declaración, Simón Trinidad también aseguró que su captura el 2 de enero pasado en Quito no se produjo gracias a un delator, aunque así lo sostuvieron medios colombianos.

“Nadie me delató en Quito. Por el seguimiento que le hacían a la persona donde me alojé, la policía me descubrió e informó a militares colombianos y agentes gringos, quienes hicieron el operativo de captura”, agregó.

Tras concretarse la detención del rebelde, el ministro colombiano de Defensa, Jorge Alberto Uribe, agradeció a los gobiernos de Ecuador y de EE.UU. Sin embargo, nunca se aclaró cuál fue la participación real de los estadounidenses en el operativo.

 

Simón Trinidad y la uribiedad

Por César Jerez. Agencia Prensa Rural. 31 de diciembre de 2004

 

Acabó mal el 2004. Acaba de ser extraditado a los Estados Unidos Simón Trinidad, el comandante de las FARC-EP, vocero de la organización guerrillera en el anterior proceso de paz, el académico de la Universidad Popular del César, el egresado bueno de Harvard y el ex gerente de banco, quien sacrificó las posibilidades oscuras de ser un usurero gerente de cartel financiero o un hedonista burgués, para irse al monte dejando a su familia y convertirse en un político armado, adolorido por la injusticia vigente de nuestro país y por la miseria de su gente.

Trinidad pasa a ser el primer preso político colombiano en el imperio, un paso más en la internacionalización de nuestra guerra, con impredecibles consecuencias en el desarrollo del conflicto político, social y armado y en la posibilidad de lograr acuerdos parciales como el canje de prisioneros de guerra o intercambio humanitario.

AUV y sus séquito se equivocaron de nuevo tratando de barajar un "cañazo" a manera de ultimátum y chantaje sobre las FARC-EP, utilizando el ilegítimo y antisoberano mecanismo de la extradición, colocándole plazos de días a una guerrilla añeja que lleva más de cuatro décadas "tocándole los cojones", como dicen en España, y desestabilizando a la pequeña élite del poder en Colombia.

 

miércoles, 15 de agosto de 2012

Ayudamemoria: EMBAJADA DE ECUADOR FUE ASALTADA 2 VECES POR MILICIANOS CUBANOS

Varios países latinoamericanos empezaron a romper relaciones con Cuba, Ecuador no lo hizo y a los pocos días tuvo un contratiempo. El 11 de diciembre de 1961, su sede diplomática en La Habana fue invadida violentamente por refugiados. A todas las embajadas entraban cubanos que, por la presión política y la escasez de alimentos, querían huir del régimen castrista. Desde junio de 1961, a la de Ecuador habían ingresado sucesivamente más de sesenta refugiados. El 11 de diciembre tenía registrados alrededor de veinte. En ese grupo se incluía a personajes como el aviador Hugo Heredia, piloto personal de Fidel Castro, quien abandonó su puesto con varios miembros de la Policía integrantes de la escolta del líder cubano. También se mencionaba a Javier Soto, acusado de tramar un atentado en contra de Castro. Otros eran estudiantes, como los hermanos Francisco y José Ondarza Cabrera, Francisco Added y Martín Morúa Delgado.
La incursión de ese 11 de diciembre de 1961 habría pasado desapercibida si no hubiese sido por el matiz de violencia que tuvo. La primera información del Canciller Francisco Acosta Yépez, militante del Partido Social Cristiano, colaborador del gobierno de Arosemena Monroy, indicaba:
     “Un camión con algunas personas se metió a la sede de la Embajada, pasando sobre la cerca; estas personas iban en busca de asilo. La guardia del Gobierno Cubano que estaba custodiando la Embajada ecuatoriana disparó sobre las personas que iban en el camión, como resultado de lo cual hay tres muertos y cuatro heridos… Los muertos y heridos cayeron dentro del predio de la Embajada Ecuatoriana… Entiendo que todas las representaciones diplomáticas en la Capital de Cuba tienen guardia, pero no se si será para impedir el uso del derecho de asilo o para resguardar las sedes de las Embajadas”.
Al siguiente día, el diario Revolución de Cuba relató:
     “En el camión viajaban diez contrarrevolucionarios procedentes de la población Güira de Melena, situada a treinta kilómetros de La Habana. Los asaltantes llegaron en el camión por la Calle 47, donde está la Embajada en el lujoso barrio Miramar. Los milicianos que estaban en guardia, al ver llegar el vehículo a toda velocidad, le dieron el alto, pero los tripulantes, en vez de obedecer la orden lanzaron el camión contra los guardias con la intención de arrollarles; fue entonces cuando los milicianos dispararon. El camión logró entrar hasta el patio de la Embajada donde otros asaltantes que se encontraban en la sede diplomática ayudaron a los recién llegados lanzando botellas contra los guardias y lograron recoger a los heridos… Cuando llegó la Cruz Roja para recoger a los heridos se produjo un nuevo desorden, pues los asilados agredieron a sus integrantes”.
El 14 de diciembre, el Canciller ecuatoriano envió una carta al gobierno cubano desmintiendo esta versión. La responsabilidad de los hechos fue de los milicianos cubanos, según esta narración que hizo Acosta Yépez:
     “El día 11 del presente mes, a las 6 y 50 minutos de la mañana, un camión ocupado por ocho personas, que buscaban asilo, penetró al inmueble de las oficinas de la Embajada del Ecuador en la ciudad de La Habana, pasando sobre una verja de malla de alambre.
     Uno de los guardias del Gobierno Nacional de Cuba, colocado en la acera de en frente del edificio, disparó su ametralladora contra el camión cuando se encontraba dentro del predio que ocupa la Embajada, resultando de ello tres muertos y cuatro heridos de los ocupantes del camión. Además algunos proyectiles hicieron impacto en la fachada lateral del edificio y uno de ellos penetró por la ventana del segundo piso que corresponde a un dormitorio que ocupan en calidad de asiladas, algunas mujeres cubanas, con el natural riesgo de sus vidas”.
Según el grupo anticastrista Circuito Sur, durante el suceso murieron alcanzados por las balas de los milicianos, los refugiados Juan Espinosa Montesino, Alberto Hernández e Israel Leal.
Por considerar que los acontecimientos iban en contra de lo dispuesto en las convenciones sobre Derecho de Asilo y sobre Funcionarios Diplomáticos, cuyo Art. 14 consagra “la inviolabilidad de la residencia particular u oficial de una Misión Diplomática”, el gobierno de Ecuador protestó y exigió las satisfacciones debidas. Además, le requirió al gobierno de Cuba salvoconductos para todas las personas que se encontraban asiladas en la Embajada, diciéndole que debía hacerlo, “a más tardar, hasta el día lunes 18 del mes que decurre”. Además, exigió que “por respeto a los Derechos Humanos, los cuatro heridos que cayeron dentro del predio de la Embajada ecuatoriana, una vez que se recuperen en su salud en el Hospital en que se encuentran, sean entregados a la Embajada del Ecuador en su calidad de asilados, y se les conceda el salvoconducto respectivo tan pronto como les sea posible viajar.”
La nota del Canciller Acosta Yépez molestó a los isleños. Su Ministro de Relaciones Exteriores, Raúl Roa García, contestó dos días después:
     “Los guardianes actuaron en un acto de absoluta y legítima defensa de sus vidas y de la obligación a que estaban comprometidos…
     Es oportuno llamar la atención a la Cancillería del Ecuador que ha prejuzgado los hechos sin solicitar siquiera información previa al Gobierno de Cuba.
     El Gobierno de Cuba considera conminatorio, inamistoso e inaceptable el señalamiento que se hace de entregas de salvoconductos a determinados asilados con plazo hasta el día 18 del mes en curso.
     La exigencia de que los cuatro heridos sean entregados a la Embajada carece de sentido, por cuanto el Gobierno Revolucionario, desde el primer instante, les brindó asistencia médica y los recluyó en un hospital, comunicando a la representación diplomática ecuatoriana que estaban a su entera disposición si deseaban aceptarlos como asilados, status que les fue conferido.”
Estos asaltos a mano armada, a las embajadas, el Canciller Roa atribuía a “los planes agresivos del Gobierno de los Estados Unidos contra Cuba, su interés en promover rupturas de relaciones con diversos pretextos y aislar a nuestro país…”
Páginas: 46,47,48,49, libro ‘Un ciclón llamado Fidel’, de Mariana Neira.
CONFLICTO DIPLOMÁTICO Y PRESIONES
El Canciller Pareja Diezcanseco renunció, y en agosto de 1980 le sustituyó el abogado y escritor Alfonso Barrera Valverde, quien le contó a la autora:
     “Cuando yo entré a la Cancillería, ni la gente de derecha ni los militares estaban muy contentos con estas relaciones con Cuba. Militares y partidos políticos, aparentemente progresistas, eran contrarios a Castro, entre esos la Democracia Popular del Vicepresidente Oswaldo Hurtado. Jaime Roldós se dio cuenta que había un fuerte movimiento en contra de Castro”.
En eso se dieron, simultáneamente, la ‘guerra de Paquisha’ con Perú y la toma de la Embajada de Ecuador, en La Habana, por parte de disidentes cubanos. Este conflicto diplomático pesó mucho. Los anticomunistas civiles y los militares, presionaron para una nueva ruptura de relaciones con el gobierno de Fidel Castro.
El anticastrista, Norberto Fuentes, relató estos sucesos en su libro Los hijos del enemigo:
     “El 13 de febrero de 1981 catorce miembros de la familia Delgado entraron en los terrenos de la Embajada de Ecuador. Unos cuantos llevaban pistolas calibre 22 (sin detonador), como medida de precaución. Tan pronto como estuvieron a salvo dentro del edificio de la embajada, los Delgado entregaron sus armas al embajador ecuatoriano, Jorge Pérez Concha”.
Las agencias internacionales de noticias dieron una versión diferente:
     “El comando armado, de veintinueve cubanos, irrumpió en la Embajada de Ecuador para reclamar asilo político y amenazó con ejecutar al embajador y a tres diplomáticos ecuatorianos que tiene en su poder, si interviene la Policía. Ingresaron con ametralladoras, granadas de mano, pistolas, cuchillos. Algunos integrantes del grupo golpearon a un guardia de seguridad cubano con un caño y le arrebataron sus armas para entrar. Tomaron cautivos al embajador Jorge Pérez Concha, de setenta y dos años, y a los diplomáticos ecuatorianos Guillermo Bassante y Francisco Proaño, más la secretaria cubana Mercedes Vásquez”.
A criterio del ex Canciller Barrera Valverde:
     “Había la consigna de fastidiarle a Jaime (Roldós) porque reinició relaciones con Cuba. Ecuador estaba en pleno enfrentamiento con Perú, en Paquisha. La toma de la embajada fue un acto programado con el afán de enfrentar a Ecuador con Cuba”.
Así se le abrió al país otro frente de conflicto. Entonces, el Presidente Roldós y su Canciller armaron una estrategia que la contó Barrera Valverde:
     “Se dio la petición de asilo con armas. Era una toma, un asalto de la embajada. Mi misión era salvar la vida del embajador y mi determinación: no romper relaciones con Cuba. Desde el principio que se dio el hecho, la decisión era no romper relaciones con Cuba, pero nadie debería saberlo. Solo sabíamos el Presidente Roldós y yo, y resolvimos que sea así, que no trascienda, porque si Cuba se enteraba, abusaría de nosotros”.
Los cubanos daban su versión de los hechos, de acuerdo a su conveniencia. Fuentes manifestó:
     “El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador dijo que, según Rómulo Juan Delgado Fernández, los refugiados son ex oficiales del ejército cubano. Él era un ex capitán de la marina mercante, destituido en marzo de 1980. En el grupo había cuatro mujeres y seis niños”.
El gobierno cubano dijo:
     “Los hermanos Rómulo y Pascual Delgado Fernández son delincuentes prontuariados.  Rómulo es un prófugo con sentencia por falsificación de moneda...  es un delincuente común acusado de robo y corrupción a menores. Pascual estaba sentenciado por asesinato a una mujer cuando estaba ebrio”.
De inmediato a la toma de la embajada, la milicia cubana, apoyada por tropas especiales, cercó la embajada y cortó el servicio eléctrico.
El Canciller Barrera Valverde convocó al embajador cubano en Quito, Fernando Flores, para conversar sobre el incidente, mientras tanto, el Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, René Anillo, anticipaba en La Habana: “Cuba no accederá a las exigencias de un grupo de 29 cubanos…”
La reacción de los anticastristas fue inmediata. Hubert Matos, ex Comandante de la revolución cubana, que luego pasó preso veinte años en La Habana, se había radicado en Caracas, donde dirigía el movimiento de oposición ‘Cuba independiente y democrática’. Desde allí le pidió al Presidente Roldós, que les conceda asilo a los veintinueve refugiados en la embajada. En Quito, la anticastrista ‘Junta Patriótica Cubana’ hizo igual.
Según Barrera Valverde, desde el principio, la decisión del gobierno ecuatoriano era no dar asilo a los cubanos que se tomaron la embajada. Contó el motivo: “No me consta que los que se tomaron la embajada tuvieran antecedentes delictivos, pero sí actuaron como delincuentes, eso les quitaba la opción al asilo”.
Presionado por los anticastristas nacionales y extranjeros, el Presidente Roldós envió a La Habana una misión de alto nivel para negociar con Cuba. La presidía el subsecretario económico Cornelio Merchán, e integraban Jaime Moncayo, ex secretario general del SELA (Sistema Económico Latinoamericano); Luis Gallegos, funcionario de la Cancillería, y dos altos oficiales militares.
Fuentes narró algunos detalles:
     “En las conversaciones estaban funcionarios del gobierno ecuatoriano, funcionarios cubanos y los Delgado. Después de siete días de negociación, Ecuador anunció que había decidido conceder asilo político a los Delgado. Se entregó a Rómulo Delgado un documento oficial del gobierno ecuatoriano que especificaba los términos del acuerdo”.
El 20 de febrero de 1981, los refugiados liberaron al embajador Pérez y a todos los rehenes. El mismo día, la misión de alto nivel regresó a Quito “creyendo que se había resuelto el dilema”.
El régimen cubano no aceptó el acuerdo e invadió la sede diplomática. Fuentes lo narró así:
     “Entre la 1 y las 4 a.m. del 21 de febrero, fuerzas especiales de Castro asaltaron la embajada ecuatoriana para detener a los disidentes. Todos los miembros de la familia Delgado fueron golpeados salvajemente, niños incluidos. Los mayores fueron encarcelados y dos de los niños fueron ‘puestos en libertad’ para entregarlos a familiares en Pinar del Río, aunque siguieron bajo vigilancia y no se les permitió asistir a la escuela. Owin Delgado, de 15 años, recibió heridas tan graves en la cara y la cabeza (casi perdió una oreja) que tuvo que ser trasladado a un hospital”.
El mismo día, el gobierno de Castro declaró a la prensa que sus milicianos ingresaron a la embajada “con la autorización del Ecuador”. El gobierno de Quito desmintió y protestó enérgicamente por la violación de su misión diplomática.
El ex Canciller Barrera Valverde aclaró lo sucedido:
     “El gobierno de Cuba se tomó la embajada, eso me molestó mucho. Es la parte desagradable. El gobierno de Cuba debió respetar la embajada. A mí no se me escapó de las manos (el conflicto), no estaba el gobierno de Cuba autorizado a realizar ninguna acción física en la embajada. Los delegados que envié dijeron sí a todo lo que proponía Fidel Castro. No es que abandonamos la sede, salieron el embajador y los funcionarios, porque los cubanos hicieron imposible permanecer allí: cortaron los servicios básicos (luz, agua) y lanzaron gases lacrimógenos al interior. Cuba jugó por su cuenta. No hubo abandono. Una cosa es abandonar y otra cosa es sacarles a los funcionarios porque no podían quedarse allí. A la fuerza se les sacó”.
Estos sucesos alentaron la presión de todos lados. Barrera Valverde lo recordó:
     “Los cubanos en Miami estaban alentados por este acto y presionaban para que Ecuador rompa con el gobierno de Castro. En el país presionaban para la ruptura los militares y partidos políticos progresistas: Liberal, Democracia Popular. Incluso el MPD, de izquierda. La Izquierda Democrática no decía nada. Yo tenía que cumplir mi palabra, no romper relaciones. Jaime (Roldós) me dijo: ‘Solo usted está por continuar relaciones”.
Los militares fueron frontales en su planteamiento. Lo relató Barrera Valverde:
     “Jaime (Roldós) me llamó a la presidencia. Allí estaba el Ministro de Defensa, Marco Subía, un caballero. Estuvimos solos los tres. Marco dijo: ‘Las Fuerzas Armadas, en su totalidad, están de acuerdo en que Cuba mantiene una política de intromisión en Ecuador. Era a propósito de unas manifestaciones que hubo en Manabí y Esmeraldas, organizadas por movimientos sociales, que los militares creían que estaban auspiciados por la embajada cubana. Por eso Marco dijo que las Fuerzas Armadas pedían la ruptura de relaciones con Cuba. Le dijo a Jaime (Roldós) que quería ir al Consejo de Generales y Almirantes con una respuesta del Presidente. Yo intervine y le dije: ‘General, dígale al Consejo de Generales que la opinión de las Fuerzas Armadas es respetable y que si el gobierno toma alguna medida, las Fuerzas Armadas serán las primeras en ser informadas. Nada más. El general salió y le dije al Presidente: ‘Si ahora dice sí a lo que le piden las Fuerzas Armadas, en el futuro dirá sí a todo”.
Este acontecimiento diplomático se diluyó rápido,  porque Ecuador tenía otro asunto importante que atender: el conflicto bélico con Perú, en la Cordillera del Cóndor (Paquisha), que concluyó el 26 de febrero de 1981, con el acuerdo de retiro de tropas.
Un día después, el 27 de febrero de 1981, llegó el Viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Ricardo Alarcón, para conversar con el Canciller ecuatoriano Alfonso Barrera. Le reiteró que Cuba había sido autorizada por la misión especial para incursionar en la embajada. Y se reactivó la presión interna para la ruptura. El Presidente Roldós dijo que si con Perú, por algo más grave (Paquisha) no se había roto relaciones, no lo iba a hacer con Cuba y le envió a Fidel la siguiente nota publicada por la revista Vistazo:
     “Las posibilidades de una relación normal entre los dos gobiernos, a más de las satisfacciones del caso por haber tomado bajo su control la embajada, dependen de un solo punto: el respeto a la integridad y a los derechos del ser humano, que en este caso deben traducirse en la protección que debe el Ecuador ejercer efectivamente sobre todos los cubanos que ocupaban la misión diplomática”. La Habana le había contestado: “Cuba mantiene sus derechos con relación a las personas arrestadas…”
Por el anticastrista Norberto Fuentes se conoció que, el 3 de marzo de 1981, el joven Owin Delgado murió. Rómulo y Pascual Delgado todavía estaban cumpliendo sus condenas de 43 y 45 años, por intentar buscar asilo político en Ecuador.
Algunos creen que el triunfo fue de Cuba. Barrera Valverde no lo consideraba así, mientras contaba esta anécdota: “Tiempo después me encontré con el Viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Alarcón, y me dijo que Ecuador le salvó a Cuba de ser un paria, porque si Ecuador rompía relaciones, todos habrían roto”.
Páginas: 144, 145, 146, 147, 148, 149, libro ‘Un ciclón llamado Fidel’, de Mariana Neira.

miércoles, 1 de agosto de 2012

¡CUIDADO! HAY UNA PLAGA DE ASALTOS EN LOS HOSPITALES

No puedo dejar de contarles algo que acabo de enterarme y demuestra que la seguridad es para todos... pero para todos los delincuentes que merodean los hospitales del Estado.
Me contaban que en el Hospital del Sur de Quito, los parientes de los enfermos que llegan a emergencias son desvalijados.
Lo sucedido hace una semana no solo fue un atraco, sino un acto criminal.
Un joven a punto de ser padre llegó en la madrugada con su mujer en labor de parto. Le pidieron una medicina -porque los hospitales del Estado tienen medicinas solo en la propaganda gubernamental-. Al salir a buscar la medicina, en la misma puerta de ese hospital un ladrón le asaltó y robó al joven todo el dinero. Llamó a sus familiares para que le ayudaran, mientras les esperaba, su joven esposa falleció.
¿Y la seguridad pregonada por los mandatarios, dónde está?
¡En la propaganda!

martes, 31 de julio de 2012

EL NEGOCIO DEL MATRIMONIO

Por MJ. Dreamms 

A los tiempos me encuentro con Graciela. Tiene un hijo único que, como hacen muchos jóvenes ahora, se casó a escondidas con la noviecita que desde el momento que le conoció, resolvió no despegarse de él. Le acompañaba a todo trámite desde las 8 de la mañana hasta altas horas de la noche. Es amor, supuse, porque así de amelcochados nos ponemos cuando estamos enamorados.
Volví a hablar con Graciela y me dijo:
   -¿Sabes por qué ha sido el apuro del casamiento de mi hijo?
   -La chica está embarazada –le dije.
   -Sí.
Hábil como es para los trabajos manuales, Graciela se dedicó a tejer escarpines, baberitos. A los tres meses, más o menos, me reencontré con mi amiga.
   -¿Sigues tejiendo escarpines?
   -¿Sabes que la chica no estuvo embarazada?
   -¡No me digas! O sea que le metió cuento a tu hijo para ‘cazarle’. ¡Qué astuta!
En ese momento recordé a una profesora que tenía siete hijos y decía habría preferido niñas “porque ahora a los varones hay que cuidarles más que a las hembritas para que no caigan en las redes de mujeres oportunistas”. Escuchando la historia de Graciela, pienso que mi profesora tuvo razón.
   -Algo intuí al principio de la relación porque la chica se pegó a mi hijo como pulga. Era exagerada. Pasaba el día con él, pero en la noche ya le llamaba. Me aguanté y no le dije nada a mi hijo porque no quería meterme en sus relaciones amorosas.
Chica interesada, con visión futurista, pensé. El hijo de mi amiga es abogado, cuando se casó daba ‘pininos’ en su profesión, luchaba para conseguir un cliente, ahora tiene un puestazo y un sueldazo.
A los tiempos volví a encontrarle a mi amiga y pese al engaño del embarazo de su nuera, la vi contenta.
   -¿Cómo está tu hijo?
   -Bien.
   -¿Y la nuera?
   -No sé qué pasó con lo del embarazo, ni quiero que me cuenten, pero la chica parece buena. Ahora que mi hijo está ganando bien, le voy a convencer para que compre un departamento y no ande arrendando.
Graciela ya tenía un plan de financiamiento. Ella pagaría ‘la entrada’ vendiendo unas colecciones valiosas que posee y su hijo pagaría el crédito.
   -Deja que tu hijo pague todo, vos cómete tu plata, pasea –le dije.
   -No, es mi hijo único y voy a ayudarle.
Ayer tuve un encuentro con Graciela. Estaba triste. Le pregunté si ya había comprado el departamento para su hijo. Casi se le van las lágrimas. Hace una semana, su hijo –karateca, por cierto- apareció con el rostro golpeado. Al siguiente día, durante el desayuno, no explicó la causa de los golpes, pero le dijo a su madre que se iba a divorciar. Graciela casi se cae de espaldas como Condorito. Días después la nuera se presenta ante mi amiga para decirle:
Que había descubierto a su hijo caminando abrazado con una pasante. “Mi hijo dijo que la abrazó porque así son los jóvenes, la estaba consolando por un problema que tenía”.
Que quiere que su hijo la siga manteniendo. Ese mismo rato le sacó a Graciela 2.000 dólares para un tratamiento médico.
En otra visita su nuera –aún- le dijo que ella tenía derecho sobre la mitad de los bienes de Graciela.
Que como parte de esos derechos, quería que Graciela le diera 50 mil dólares.
   -Y acabo de enterarme –dice Graciela- que su familia ha sido de mecánicos y andan buscándole a mi hijo, seguramente con la intención de golpearle.
Graciela tuvo que buscar abogado para defenderse de esta chica “cara de mosquimuerta, que parecía que no quebraba un plato”, que sacó las uñas y puso a reflexionar sobre el ‘negocio del matrimonio’.