jueves, 27 de septiembre de 2012

‘Guerra sicológica’ idéntica a la del gobierno socialcristiano

Las amenazas a los periodistas de ahora, en el gobierno de la ‘revolución ciudadana’ son idénticas a aquellas que la familia Restrepo recibía en el gobierno socialcristiano de Febres Cordero cuando buscaba a Santiago y Andrés, de 17 y 14 años, desaparecidos y asesinados por fuerzas de seguridad de ese gobierno, según descubrió la Comisión Internacional. El gobierno socialcristiano usó la ‘guerra sicológica’ para tratar de impedir que la familia buscara a los chicos, ahora se usa la ‘guerra sicológica’ para tratar de evitar que los periodistas investiguen.

Ayudamemoria:

Desacreditan a las víctimas
“El 25 de enero Morán fue al colegio de Andrés para decirles a sus compañeros que no valía la pena reclamar por él y su hermano, porque eran unos drogadictos, alcohólicos y mujeriegos.”

Amenazan a las víctimas por teléfono
“Mientras Morán y Argoti decían que investigaban, los Restrepo y sus amigos vivían hechos extraños.
-Ingeniero, me han dicho que se va del país y que está vendiendo todo. ¿Cuánto vale su casa, cuánto sus almacenes de El Bosque?
-No me voy ni están en venta –contestó Pedro Restrepo.
El teléfono fue usado como arma para múltiples amenazas. Incluso la pequeña María Fernanda Restrepo fue una víctima.
Un anónimo llamó a Titi Cruz, una joven amiga de la familia.
-¿Quién eres?
-Soy Titi Cruz.
-Tú no eres Titi Cruz, eres la chica Restrepo y vas a morir.”

Persiguen personalmente a las víctimas
“El teniente coronel Elías Federico Mera Cevallos… había asumido esa jefatura (del SIC-P) en septiembre de 1988 y por la trascendencia nacional e internacional que adquirió el caso, dispuso que el teniente Miguel Angel Chiriboga Hurtado, jefe de la Brigada de Menores, y el agente Luis Sampedro, elaboraron un informe relámpago.
Chiriboga y el teniente Edmundo Mera Hernández, fueron identificados por Luz Helena (la madre de Santiago y Andrés) como los hombres que tiempo atrás la habían perseguido desde tempranas horas de la mañana por todas las iglesias a donde iba a orar.”
Libro ‘Caso Restrepo, Crimen de Estado’, de Mariana Neira, Editorial Eskeletra. Páginas 37, 41, 105.

martes, 25 de septiembre de 2012

Correazos a los desprotegidos, regalos a los amigos

Al futbolista ecuatoriano ‘Sombra’ Espinosa, el SRI le mandó a la cárcel por una deuda de 52 mil dólares, al siniestro argentino Duzac que se llevó 800 mil de COFIEC con garantías de bienes del Estado ecuatoriano, sus poderosos protectores no le encuentran.
Véalo en esta Ayudamemoria:

‘SOMBRA’ A LA CÁRCEL POR 52 MIL

“Los pendientes tributarios que mantienen los clubes y varios jugadores con el SRI tomaron relevancia por la detención de Giovanny Espinoza, el miércoles (19 septiembre).
Ese día, el defensa de Deportivo Quito fue aprehendido por la Policía Judicial en el aeropuerto, a su arribo de Cochabamba, Bolivia.
A esa ciudad viajó el pasado 16 de septiembre, violando una orden de prohibición de salida del país, impuesta el 13 de agosto, a raíz de una deuda con el SRI. La ‘Sombra’, como apodan al ex seleccionado, tiene un juicio coactivo por USD 51 980,30.
El caso trascendió por ser una figura pública, según Paola Hidalgo, directora de la Regional Norte del Servicio de Rentas Internas, ya que ese es solo uno de los 2 301 procesos de juicios coactivos que el SRI inició este año…
En el caso de Espinoza, el SRI espera que después de obtener la libertad por el tema de desacato –al salir del país– la ‘Sombra’ se acerque a las oficinas para saldar la deuda. Solo allí terminará el juicio en su contra.
Hasta el momento, el SRI no ha podido embargarle ningún bien mueble o inmueble a Espinoza, ya que según el Registro de la Propiedad no registra nada a su nombre. Tampoco cuentas bancarias…”
Diario El Comercio, domingo 23 septiembre 2012. Página 28.

DUZAC SE FUE CON 800 MIL Y NO PASA NADA

“La entrega de créditos en el Banco Cofiec, cuyo principal accionista es el Estado, a través de la Unidad de Gestión de Derecho Público (Ugedep), mantiene a la entidad en una situación complicada.
El primer crédito por USD 800 000 se dio en tiempo récord, del 2 al 7 de diciembre del 2011, al ciudadano argentino Gastón Duzac, y actualmente está impago….
En la demanda civil no consta el domicilio de Duzac, de 37 años, y se desconoce su paradero. Este ciudadano ha mantenido relaciones cercanas con Pedro Delgado, presidente del Directorio del Banco Central y representante legal de la Ugedep; y el cuñado de Delgado, Francisco Endara.
Además, fue parte de la comitiva oficial, liderada por Delgado, que viajó a Rusia e Irán, del 14 al 21 de febrero pasado, con la autorización de la Presidencia.
Inicialmente, este crédito estuvo respaldado con garantías no ejecutables, como los certificados de depósito de Seguros Rocafuerte y una propiedad incautada por el Estado a los ex dueños del extinto Filanbanco. El respaldo temporal fue aceptado por el banco hasta que Duzac recibiera un bien de Maxigraf, también estatal.
Luego se entregó como garantía la maquinaria de la Agrícola Las Mercedes, también incautada por el Gobierno, y de una producción futura de palma africana, que cubriría el 250% del crédito.
Está previsto que la obligación sea cancelada hasta el 15 de este mes (septiembre), de lo contrario se analiza la ejecución de las garantías por USD 1,2 millones”.
El Comercio. Unidad de InvestigaciónViernes 14/09/2012

lunes, 17 de septiembre de 2012

Ayudamemoria: Cómo capturaron a Simón Trinidad en Quito


Captura de 'Simón Trinidad' fue posible gracias a la información de un ex militante de las Farc

El Tiempo (Colombia). Enero 4 de 2004

 

El informante obtendrá una recompensa de un poco más de 800 mil dólares, dijo a EL TIEMPO una alta fuente que participó en la cacería del guerrillero.

Se trata de un hombre que tras militar en la subversión, decidió abandonar sus filas y reinsertarse en junio del 2003, para ganarse ahora la millonaria recompensa que el gobierno colombiano ofrece por cualquiera de los jefes máximos de las Farc, el Eln o los paramilitares.

Su delación, ocurrida hace unas pocas semanas, ayudó a atar los cabos que venían siendo descubiertos por inteligencia del Ejército, desde agosto del 2003, cuando el propio presidente Álvaro Uribe les había puesto la tarea de hurgar en Quito.

Por esas fechas, el mandatario había estado de visita en la capital ecuatoriana y varias personas le pidieron audiencia para contarle que líderes de las Farc estaban convirtiendo la capital ecuatoriana en sede de reuniones.

Durante los cerca de seis meses de pesquisas, lideradas por el Ejército, otras agencias colombianas, como la inteligencia de la Policía, el CTI de la Fiscalía, e inclusive el Servicio de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) y la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de ese país, apoyaron la investigación.

Sin embargo, los datos recogidos aún no eran tan contundentes, hasta cuando apareció el informante y les contó detalles de cómo se movían en Ecuador y Colombia Juvenal Ovidio Ricardo Palmera, 'Simón Trinidad'; otros cinco jefes del estado mayor y del secretariado de las Farc, al igual que amigos y familiares.

También les relató pormenores de las dolencias físicas que padece el guerrillero, los medicamentos que usa y los nombres de los centros médicos de Quito donde, bajo nombre falso, recibía atención, datos que resultaron esenciales para dar con su paradero.

En el monte

Uno de los datos clave que suministró el informante fue cómo a comienzos del año pasado la cúpula de las Farc le ordenó al frente primero de esa organización cuidar en sus campamentos a 'Trinidad' mientras este se recuperaba de unas graves dolencias, al parecer producidas por un cáncer de próstata o de testículo.

El frente primero o 'Armando Ríos' es considerado uno de los más ricos y organizados. Tiene gran influencia en el Guaviare, zona a la que llegó en los años 80, y prácticamente domina los corredores entre Calamar, Miraflores y El Retorno, donde controla el negocio de la cocaína. Es el responsable de la toma de Mitú (Vaupés), donde murieron 35 policías y secuestraron a otros 65.

En esta región, el frente primero construyó grandes centros de descanso y vacacionales -algunos desmantelados en el 2002 por el Ejército-, donde los informes de inteligencia dan cuenta de que en los meses recientes se refugiaba 'Simón Trinidad'.

Luego, a finales de septiembre, una nueva interceptación electrónica confirmó que guerrilleros de ese frente buscaban afanosamente unos medicamentos para 'Trinidad', entre ellos uno para el sistema urinario.

De allí, revela la investigación, 'Trinidad' viajaba esporádicamente a Putumayo, casi siempre protegido por al menos una docena de hombres vestidos de civil. Desde entonces, por lo menos 15 oficiales de las distintas fuerzas se trasladaron a los cascos urbanos de la zona en busca de su rastro.

El 16 de diciembre, inteligencia del Ejército estableció que el jefe guerrillero había salido de Puerto Ospina, en el Putumayo, rumbo a Quito, en compañía de una compañera sentimental. Ingresó, según lo registra la Tarjeta Andina de Migración de Ecuador, con el nombre de Juan Alberto Rodríguez González, con cédula 19'715.420.

Según la tarjeta, había nacido el 2 de septiembre de 1950 y no el 30 de julio del mismo año, cuando efectivamente nació el subversivo, que desde 1987 milita en las Farc.

Por esos mismos días, los investigadores también conocieron que la hija de la compañera de 'Trinidad' -una adolescente de 13 años- había ingresado a Guayaquil en septiembre y que desde allí se había trasladado a Quito a reunirse con su mamá.

La casa

El punto de encuentro era una modesta casa ubicada en una zona popular de Quito, que por temporadas albergaba a familiares y testaferros de otros jefes subversivos.

Los seguimientos -que quedaron registrados en videos como los que ayer reveló Inteligencia del Ejército- mostraban a 'Trinidad' caminando por las calles de Quito, a veces en compañía de las dos mujeres, y en otras ocasiones, completamente solo.

Siempre cubría su cabeza con una gorra negra, usaba gafas de marco negro y en ocasiones vestía de corbata o cubría su cuello con una bufanda. En varias oportunidades se le vio cargando paquetes de mercado.

¿Por qué no lo capturaron en ese momento? Inteligencia tenía información de que otros jefes guerrilleros se estaban moviendo por otros países para hacer escala luego en Quito y de allí dirigirse a una cumbre secreta en Manaos (Brasil). La idea, entonces, era esperar y capturar la mayor cantidad posible de jefes guerrilleros.

Mientras tanto, los hombres de inteligencia realizaban fiestas y asados en la vecindad de 'Trinidad' para no perder su rastro. Inclusive, lo siguieron hasta la clínica Eugenio Espejo, donde le efectuaron un examen de próstata, y hasta la oficina donde le entregaron cédula y pasaporte ecuatorianos a nombre de Cristo Rey Mariscal Peralta.

Tan cerca estuvieron de él que en una oportunidad esperaron en una mesa contigua a la suya, en la pollería Texas Company, donde 'Trinidad' se tomó una gaseosa, para luego coger el vaso y llevarlo a un laboratorio de criminalística y cotejar sus huellas dactilares.

La espera culminó el pasado viernes cuando los oficiales, tanto del Ejército como de la Policía, conocieron que ningún otro jefe guerrillero iba a ir a Quito y que, por el contrario, 'Trinidad' se aprestaba a abandonar tierra ecuatoriana.

'Simón Trinidad' fue capturado a las 10 de la noche en la avenida Amazonas, por la Policía ecuatoriana, cuyo portavoz, Manuel Sarmiento, reiteró ayer que la detención no obedeció a ninguna operación de seguimiento sino a una acción rutinaria de registro migratorio. "Si hubo un seguimiento por parte de Colombia, eso no llevó a su detención... No podemos alterar la verdad", le dijo a la agencia de noticias AFP.

El guerrillero se identificó inicialmente como Cristo Rey Mariscal Peralta, pero 15 minutos más tarde, en la jefatura policial más cercana, admitió ser 'Simón Trinidad'. Aseguró que estaba en gestiones diplomáticas a nombre de las Farc y que solicitaría asilo político porque su vida corría peligro en Colombia.

Pero su suerte estaba echada. Dieciocho horas más tarde ingresaba a un calabozo del 'búnker' de la Fiscalía en Bogotá, donde ayer comenzó a rendir indagatoria por 59 registros judiciales en su contra.

 

Presidente negó versión sobre la captura de ‘Simón Trinidad’

El Universo. Jueves 18 de marzo del 2004

EFE-AP | BOGOTÁ

 

El presidente de Ecuador, Lucio Gutiérrez, aseguró ayer en esta ciudad que en la detención de Ricardo Palmera, alias Simón Trinidad, líder guerrillero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en enero pasado, solo participaron fuerzas policiales de su país.

Gutiérrez respondió así a una declaración escrita difundida en esta ciudad por el semanario Voz, en la que Simón Trinidad señaló que en su detención participaron “militares colombianos y agentes gringos (de EE.UU.)”.

El mandatario ecuatoriano hizo esta declaración tras recibir un título Honoris Causa en Administración de Empresas, conferido por la Universidad Militar Nueva Granada, de Bogotá.

En su declaración, Simón Trinidad también aseguró que su captura el 2 de enero pasado en Quito no se produjo gracias a un delator, aunque así lo sostuvieron medios colombianos.

“Nadie me delató en Quito. Por el seguimiento que le hacían a la persona donde me alojé, la policía me descubrió e informó a militares colombianos y agentes gringos, quienes hicieron el operativo de captura”, agregó.

Tras concretarse la detención del rebelde, el ministro colombiano de Defensa, Jorge Alberto Uribe, agradeció a los gobiernos de Ecuador y de EE.UU. Sin embargo, nunca se aclaró cuál fue la participación real de los estadounidenses en el operativo.

 

Simón Trinidad y la uribiedad

Por César Jerez. Agencia Prensa Rural. 31 de diciembre de 2004

 

Acabó mal el 2004. Acaba de ser extraditado a los Estados Unidos Simón Trinidad, el comandante de las FARC-EP, vocero de la organización guerrillera en el anterior proceso de paz, el académico de la Universidad Popular del César, el egresado bueno de Harvard y el ex gerente de banco, quien sacrificó las posibilidades oscuras de ser un usurero gerente de cartel financiero o un hedonista burgués, para irse al monte dejando a su familia y convertirse en un político armado, adolorido por la injusticia vigente de nuestro país y por la miseria de su gente.

Trinidad pasa a ser el primer preso político colombiano en el imperio, un paso más en la internacionalización de nuestra guerra, con impredecibles consecuencias en el desarrollo del conflicto político, social y armado y en la posibilidad de lograr acuerdos parciales como el canje de prisioneros de guerra o intercambio humanitario.

AUV y sus séquito se equivocaron de nuevo tratando de barajar un "cañazo" a manera de ultimátum y chantaje sobre las FARC-EP, utilizando el ilegítimo y antisoberano mecanismo de la extradición, colocándole plazos de días a una guerrilla añeja que lleva más de cuatro décadas "tocándole los cojones", como dicen en España, y desestabilizando a la pequeña élite del poder en Colombia.

 

miércoles, 15 de agosto de 2012

Ayudamemoria: EMBAJADA DE ECUADOR FUE ASALTADA 2 VECES POR MILICIANOS CUBANOS

Varios países latinoamericanos empezaron a romper relaciones con Cuba, Ecuador no lo hizo y a los pocos días tuvo un contratiempo. El 11 de diciembre de 1961, su sede diplomática en La Habana fue invadida violentamente por refugiados. A todas las embajadas entraban cubanos que, por la presión política y la escasez de alimentos, querían huir del régimen castrista. Desde junio de 1961, a la de Ecuador habían ingresado sucesivamente más de sesenta refugiados. El 11 de diciembre tenía registrados alrededor de veinte. En ese grupo se incluía a personajes como el aviador Hugo Heredia, piloto personal de Fidel Castro, quien abandonó su puesto con varios miembros de la Policía integrantes de la escolta del líder cubano. También se mencionaba a Javier Soto, acusado de tramar un atentado en contra de Castro. Otros eran estudiantes, como los hermanos Francisco y José Ondarza Cabrera, Francisco Added y Martín Morúa Delgado.
La incursión de ese 11 de diciembre de 1961 habría pasado desapercibida si no hubiese sido por el matiz de violencia que tuvo. La primera información del Canciller Francisco Acosta Yépez, militante del Partido Social Cristiano, colaborador del gobierno de Arosemena Monroy, indicaba:
     “Un camión con algunas personas se metió a la sede de la Embajada, pasando sobre la cerca; estas personas iban en busca de asilo. La guardia del Gobierno Cubano que estaba custodiando la Embajada ecuatoriana disparó sobre las personas que iban en el camión, como resultado de lo cual hay tres muertos y cuatro heridos… Los muertos y heridos cayeron dentro del predio de la Embajada Ecuatoriana… Entiendo que todas las representaciones diplomáticas en la Capital de Cuba tienen guardia, pero no se si será para impedir el uso del derecho de asilo o para resguardar las sedes de las Embajadas”.
Al siguiente día, el diario Revolución de Cuba relató:
     “En el camión viajaban diez contrarrevolucionarios procedentes de la población Güira de Melena, situada a treinta kilómetros de La Habana. Los asaltantes llegaron en el camión por la Calle 47, donde está la Embajada en el lujoso barrio Miramar. Los milicianos que estaban en guardia, al ver llegar el vehículo a toda velocidad, le dieron el alto, pero los tripulantes, en vez de obedecer la orden lanzaron el camión contra los guardias con la intención de arrollarles; fue entonces cuando los milicianos dispararon. El camión logró entrar hasta el patio de la Embajada donde otros asaltantes que se encontraban en la sede diplomática ayudaron a los recién llegados lanzando botellas contra los guardias y lograron recoger a los heridos… Cuando llegó la Cruz Roja para recoger a los heridos se produjo un nuevo desorden, pues los asilados agredieron a sus integrantes”.
El 14 de diciembre, el Canciller ecuatoriano envió una carta al gobierno cubano desmintiendo esta versión. La responsabilidad de los hechos fue de los milicianos cubanos, según esta narración que hizo Acosta Yépez:
     “El día 11 del presente mes, a las 6 y 50 minutos de la mañana, un camión ocupado por ocho personas, que buscaban asilo, penetró al inmueble de las oficinas de la Embajada del Ecuador en la ciudad de La Habana, pasando sobre una verja de malla de alambre.
     Uno de los guardias del Gobierno Nacional de Cuba, colocado en la acera de en frente del edificio, disparó su ametralladora contra el camión cuando se encontraba dentro del predio que ocupa la Embajada, resultando de ello tres muertos y cuatro heridos de los ocupantes del camión. Además algunos proyectiles hicieron impacto en la fachada lateral del edificio y uno de ellos penetró por la ventana del segundo piso que corresponde a un dormitorio que ocupan en calidad de asiladas, algunas mujeres cubanas, con el natural riesgo de sus vidas”.
Según el grupo anticastrista Circuito Sur, durante el suceso murieron alcanzados por las balas de los milicianos, los refugiados Juan Espinosa Montesino, Alberto Hernández e Israel Leal.
Por considerar que los acontecimientos iban en contra de lo dispuesto en las convenciones sobre Derecho de Asilo y sobre Funcionarios Diplomáticos, cuyo Art. 14 consagra “la inviolabilidad de la residencia particular u oficial de una Misión Diplomática”, el gobierno de Ecuador protestó y exigió las satisfacciones debidas. Además, le requirió al gobierno de Cuba salvoconductos para todas las personas que se encontraban asiladas en la Embajada, diciéndole que debía hacerlo, “a más tardar, hasta el día lunes 18 del mes que decurre”. Además, exigió que “por respeto a los Derechos Humanos, los cuatro heridos que cayeron dentro del predio de la Embajada ecuatoriana, una vez que se recuperen en su salud en el Hospital en que se encuentran, sean entregados a la Embajada del Ecuador en su calidad de asilados, y se les conceda el salvoconducto respectivo tan pronto como les sea posible viajar.”
La nota del Canciller Acosta Yépez molestó a los isleños. Su Ministro de Relaciones Exteriores, Raúl Roa García, contestó dos días después:
     “Los guardianes actuaron en un acto de absoluta y legítima defensa de sus vidas y de la obligación a que estaban comprometidos…
     Es oportuno llamar la atención a la Cancillería del Ecuador que ha prejuzgado los hechos sin solicitar siquiera información previa al Gobierno de Cuba.
     El Gobierno de Cuba considera conminatorio, inamistoso e inaceptable el señalamiento que se hace de entregas de salvoconductos a determinados asilados con plazo hasta el día 18 del mes en curso.
     La exigencia de que los cuatro heridos sean entregados a la Embajada carece de sentido, por cuanto el Gobierno Revolucionario, desde el primer instante, les brindó asistencia médica y los recluyó en un hospital, comunicando a la representación diplomática ecuatoriana que estaban a su entera disposición si deseaban aceptarlos como asilados, status que les fue conferido.”
Estos asaltos a mano armada, a las embajadas, el Canciller Roa atribuía a “los planes agresivos del Gobierno de los Estados Unidos contra Cuba, su interés en promover rupturas de relaciones con diversos pretextos y aislar a nuestro país…”
Páginas: 46,47,48,49, libro ‘Un ciclón llamado Fidel’, de Mariana Neira.
CONFLICTO DIPLOMÁTICO Y PRESIONES
El Canciller Pareja Diezcanseco renunció, y en agosto de 1980 le sustituyó el abogado y escritor Alfonso Barrera Valverde, quien le contó a la autora:
     “Cuando yo entré a la Cancillería, ni la gente de derecha ni los militares estaban muy contentos con estas relaciones con Cuba. Militares y partidos políticos, aparentemente progresistas, eran contrarios a Castro, entre esos la Democracia Popular del Vicepresidente Oswaldo Hurtado. Jaime Roldós se dio cuenta que había un fuerte movimiento en contra de Castro”.
En eso se dieron, simultáneamente, la ‘guerra de Paquisha’ con Perú y la toma de la Embajada de Ecuador, en La Habana, por parte de disidentes cubanos. Este conflicto diplomático pesó mucho. Los anticomunistas civiles y los militares, presionaron para una nueva ruptura de relaciones con el gobierno de Fidel Castro.
El anticastrista, Norberto Fuentes, relató estos sucesos en su libro Los hijos del enemigo:
     “El 13 de febrero de 1981 catorce miembros de la familia Delgado entraron en los terrenos de la Embajada de Ecuador. Unos cuantos llevaban pistolas calibre 22 (sin detonador), como medida de precaución. Tan pronto como estuvieron a salvo dentro del edificio de la embajada, los Delgado entregaron sus armas al embajador ecuatoriano, Jorge Pérez Concha”.
Las agencias internacionales de noticias dieron una versión diferente:
     “El comando armado, de veintinueve cubanos, irrumpió en la Embajada de Ecuador para reclamar asilo político y amenazó con ejecutar al embajador y a tres diplomáticos ecuatorianos que tiene en su poder, si interviene la Policía. Ingresaron con ametralladoras, granadas de mano, pistolas, cuchillos. Algunos integrantes del grupo golpearon a un guardia de seguridad cubano con un caño y le arrebataron sus armas para entrar. Tomaron cautivos al embajador Jorge Pérez Concha, de setenta y dos años, y a los diplomáticos ecuatorianos Guillermo Bassante y Francisco Proaño, más la secretaria cubana Mercedes Vásquez”.
A criterio del ex Canciller Barrera Valverde:
     “Había la consigna de fastidiarle a Jaime (Roldós) porque reinició relaciones con Cuba. Ecuador estaba en pleno enfrentamiento con Perú, en Paquisha. La toma de la embajada fue un acto programado con el afán de enfrentar a Ecuador con Cuba”.
Así se le abrió al país otro frente de conflicto. Entonces, el Presidente Roldós y su Canciller armaron una estrategia que la contó Barrera Valverde:
     “Se dio la petición de asilo con armas. Era una toma, un asalto de la embajada. Mi misión era salvar la vida del embajador y mi determinación: no romper relaciones con Cuba. Desde el principio que se dio el hecho, la decisión era no romper relaciones con Cuba, pero nadie debería saberlo. Solo sabíamos el Presidente Roldós y yo, y resolvimos que sea así, que no trascienda, porque si Cuba se enteraba, abusaría de nosotros”.
Los cubanos daban su versión de los hechos, de acuerdo a su conveniencia. Fuentes manifestó:
     “El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador dijo que, según Rómulo Juan Delgado Fernández, los refugiados son ex oficiales del ejército cubano. Él era un ex capitán de la marina mercante, destituido en marzo de 1980. En el grupo había cuatro mujeres y seis niños”.
El gobierno cubano dijo:
     “Los hermanos Rómulo y Pascual Delgado Fernández son delincuentes prontuariados.  Rómulo es un prófugo con sentencia por falsificación de moneda...  es un delincuente común acusado de robo y corrupción a menores. Pascual estaba sentenciado por asesinato a una mujer cuando estaba ebrio”.
De inmediato a la toma de la embajada, la milicia cubana, apoyada por tropas especiales, cercó la embajada y cortó el servicio eléctrico.
El Canciller Barrera Valverde convocó al embajador cubano en Quito, Fernando Flores, para conversar sobre el incidente, mientras tanto, el Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, René Anillo, anticipaba en La Habana: “Cuba no accederá a las exigencias de un grupo de 29 cubanos…”
La reacción de los anticastristas fue inmediata. Hubert Matos, ex Comandante de la revolución cubana, que luego pasó preso veinte años en La Habana, se había radicado en Caracas, donde dirigía el movimiento de oposición ‘Cuba independiente y democrática’. Desde allí le pidió al Presidente Roldós, que les conceda asilo a los veintinueve refugiados en la embajada. En Quito, la anticastrista ‘Junta Patriótica Cubana’ hizo igual.
Según Barrera Valverde, desde el principio, la decisión del gobierno ecuatoriano era no dar asilo a los cubanos que se tomaron la embajada. Contó el motivo: “No me consta que los que se tomaron la embajada tuvieran antecedentes delictivos, pero sí actuaron como delincuentes, eso les quitaba la opción al asilo”.
Presionado por los anticastristas nacionales y extranjeros, el Presidente Roldós envió a La Habana una misión de alto nivel para negociar con Cuba. La presidía el subsecretario económico Cornelio Merchán, e integraban Jaime Moncayo, ex secretario general del SELA (Sistema Económico Latinoamericano); Luis Gallegos, funcionario de la Cancillería, y dos altos oficiales militares.
Fuentes narró algunos detalles:
     “En las conversaciones estaban funcionarios del gobierno ecuatoriano, funcionarios cubanos y los Delgado. Después de siete días de negociación, Ecuador anunció que había decidido conceder asilo político a los Delgado. Se entregó a Rómulo Delgado un documento oficial del gobierno ecuatoriano que especificaba los términos del acuerdo”.
El 20 de febrero de 1981, los refugiados liberaron al embajador Pérez y a todos los rehenes. El mismo día, la misión de alto nivel regresó a Quito “creyendo que se había resuelto el dilema”.
El régimen cubano no aceptó el acuerdo e invadió la sede diplomática. Fuentes lo narró así:
     “Entre la 1 y las 4 a.m. del 21 de febrero, fuerzas especiales de Castro asaltaron la embajada ecuatoriana para detener a los disidentes. Todos los miembros de la familia Delgado fueron golpeados salvajemente, niños incluidos. Los mayores fueron encarcelados y dos de los niños fueron ‘puestos en libertad’ para entregarlos a familiares en Pinar del Río, aunque siguieron bajo vigilancia y no se les permitió asistir a la escuela. Owin Delgado, de 15 años, recibió heridas tan graves en la cara y la cabeza (casi perdió una oreja) que tuvo que ser trasladado a un hospital”.
El mismo día, el gobierno de Castro declaró a la prensa que sus milicianos ingresaron a la embajada “con la autorización del Ecuador”. El gobierno de Quito desmintió y protestó enérgicamente por la violación de su misión diplomática.
El ex Canciller Barrera Valverde aclaró lo sucedido:
     “El gobierno de Cuba se tomó la embajada, eso me molestó mucho. Es la parte desagradable. El gobierno de Cuba debió respetar la embajada. A mí no se me escapó de las manos (el conflicto), no estaba el gobierno de Cuba autorizado a realizar ninguna acción física en la embajada. Los delegados que envié dijeron sí a todo lo que proponía Fidel Castro. No es que abandonamos la sede, salieron el embajador y los funcionarios, porque los cubanos hicieron imposible permanecer allí: cortaron los servicios básicos (luz, agua) y lanzaron gases lacrimógenos al interior. Cuba jugó por su cuenta. No hubo abandono. Una cosa es abandonar y otra cosa es sacarles a los funcionarios porque no podían quedarse allí. A la fuerza se les sacó”.
Estos sucesos alentaron la presión de todos lados. Barrera Valverde lo recordó:
     “Los cubanos en Miami estaban alentados por este acto y presionaban para que Ecuador rompa con el gobierno de Castro. En el país presionaban para la ruptura los militares y partidos políticos progresistas: Liberal, Democracia Popular. Incluso el MPD, de izquierda. La Izquierda Democrática no decía nada. Yo tenía que cumplir mi palabra, no romper relaciones. Jaime (Roldós) me dijo: ‘Solo usted está por continuar relaciones”.
Los militares fueron frontales en su planteamiento. Lo relató Barrera Valverde:
     “Jaime (Roldós) me llamó a la presidencia. Allí estaba el Ministro de Defensa, Marco Subía, un caballero. Estuvimos solos los tres. Marco dijo: ‘Las Fuerzas Armadas, en su totalidad, están de acuerdo en que Cuba mantiene una política de intromisión en Ecuador. Era a propósito de unas manifestaciones que hubo en Manabí y Esmeraldas, organizadas por movimientos sociales, que los militares creían que estaban auspiciados por la embajada cubana. Por eso Marco dijo que las Fuerzas Armadas pedían la ruptura de relaciones con Cuba. Le dijo a Jaime (Roldós) que quería ir al Consejo de Generales y Almirantes con una respuesta del Presidente. Yo intervine y le dije: ‘General, dígale al Consejo de Generales que la opinión de las Fuerzas Armadas es respetable y que si el gobierno toma alguna medida, las Fuerzas Armadas serán las primeras en ser informadas. Nada más. El general salió y le dije al Presidente: ‘Si ahora dice sí a lo que le piden las Fuerzas Armadas, en el futuro dirá sí a todo”.
Este acontecimiento diplomático se diluyó rápido,  porque Ecuador tenía otro asunto importante que atender: el conflicto bélico con Perú, en la Cordillera del Cóndor (Paquisha), que concluyó el 26 de febrero de 1981, con el acuerdo de retiro de tropas.
Un día después, el 27 de febrero de 1981, llegó el Viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Ricardo Alarcón, para conversar con el Canciller ecuatoriano Alfonso Barrera. Le reiteró que Cuba había sido autorizada por la misión especial para incursionar en la embajada. Y se reactivó la presión interna para la ruptura. El Presidente Roldós dijo que si con Perú, por algo más grave (Paquisha) no se había roto relaciones, no lo iba a hacer con Cuba y le envió a Fidel la siguiente nota publicada por la revista Vistazo:
     “Las posibilidades de una relación normal entre los dos gobiernos, a más de las satisfacciones del caso por haber tomado bajo su control la embajada, dependen de un solo punto: el respeto a la integridad y a los derechos del ser humano, que en este caso deben traducirse en la protección que debe el Ecuador ejercer efectivamente sobre todos los cubanos que ocupaban la misión diplomática”. La Habana le había contestado: “Cuba mantiene sus derechos con relación a las personas arrestadas…”
Por el anticastrista Norberto Fuentes se conoció que, el 3 de marzo de 1981, el joven Owin Delgado murió. Rómulo y Pascual Delgado todavía estaban cumpliendo sus condenas de 43 y 45 años, por intentar buscar asilo político en Ecuador.
Algunos creen que el triunfo fue de Cuba. Barrera Valverde no lo consideraba así, mientras contaba esta anécdota: “Tiempo después me encontré con el Viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Alarcón, y me dijo que Ecuador le salvó a Cuba de ser un paria, porque si Ecuador rompía relaciones, todos habrían roto”.
Páginas: 144, 145, 146, 147, 148, 149, libro ‘Un ciclón llamado Fidel’, de Mariana Neira.

miércoles, 1 de agosto de 2012

¡CUIDADO! HAY UNA PLAGA DE ASALTOS EN LOS HOSPITALES

No puedo dejar de contarles algo que acabo de enterarme y demuestra que la seguridad es para todos... pero para todos los delincuentes que merodean los hospitales del Estado.
Me contaban que en el Hospital del Sur de Quito, los parientes de los enfermos que llegan a emergencias son desvalijados.
Lo sucedido hace una semana no solo fue un atraco, sino un acto criminal.
Un joven a punto de ser padre llegó en la madrugada con su mujer en labor de parto. Le pidieron una medicina -porque los hospitales del Estado tienen medicinas solo en la propaganda gubernamental-. Al salir a buscar la medicina, en la misma puerta de ese hospital un ladrón le asaltó y robó al joven todo el dinero. Llamó a sus familiares para que le ayudaran, mientras les esperaba, su joven esposa falleció.
¿Y la seguridad pregonada por los mandatarios, dónde está?
¡En la propaganda!

martes, 31 de julio de 2012

EL NEGOCIO DEL MATRIMONIO

Por MJ. Dreamms 

A los tiempos me encuentro con Graciela. Tiene un hijo único que, como hacen muchos jóvenes ahora, se casó a escondidas con la noviecita que desde el momento que le conoció, resolvió no despegarse de él. Le acompañaba a todo trámite desde las 8 de la mañana hasta altas horas de la noche. Es amor, supuse, porque así de amelcochados nos ponemos cuando estamos enamorados.
Volví a hablar con Graciela y me dijo:
   -¿Sabes por qué ha sido el apuro del casamiento de mi hijo?
   -La chica está embarazada –le dije.
   -Sí.
Hábil como es para los trabajos manuales, Graciela se dedicó a tejer escarpines, baberitos. A los tres meses, más o menos, me reencontré con mi amiga.
   -¿Sigues tejiendo escarpines?
   -¿Sabes que la chica no estuvo embarazada?
   -¡No me digas! O sea que le metió cuento a tu hijo para ‘cazarle’. ¡Qué astuta!
En ese momento recordé a una profesora que tenía siete hijos y decía habría preferido niñas “porque ahora a los varones hay que cuidarles más que a las hembritas para que no caigan en las redes de mujeres oportunistas”. Escuchando la historia de Graciela, pienso que mi profesora tuvo razón.
   -Algo intuí al principio de la relación porque la chica se pegó a mi hijo como pulga. Era exagerada. Pasaba el día con él, pero en la noche ya le llamaba. Me aguanté y no le dije nada a mi hijo porque no quería meterme en sus relaciones amorosas.
Chica interesada, con visión futurista, pensé. El hijo de mi amiga es abogado, cuando se casó daba ‘pininos’ en su profesión, luchaba para conseguir un cliente, ahora tiene un puestazo y un sueldazo.
A los tiempos volví a encontrarle a mi amiga y pese al engaño del embarazo de su nuera, la vi contenta.
   -¿Cómo está tu hijo?
   -Bien.
   -¿Y la nuera?
   -No sé qué pasó con lo del embarazo, ni quiero que me cuenten, pero la chica parece buena. Ahora que mi hijo está ganando bien, le voy a convencer para que compre un departamento y no ande arrendando.
Graciela ya tenía un plan de financiamiento. Ella pagaría ‘la entrada’ vendiendo unas colecciones valiosas que posee y su hijo pagaría el crédito.
   -Deja que tu hijo pague todo, vos cómete tu plata, pasea –le dije.
   -No, es mi hijo único y voy a ayudarle.
Ayer tuve un encuentro con Graciela. Estaba triste. Le pregunté si ya había comprado el departamento para su hijo. Casi se le van las lágrimas. Hace una semana, su hijo –karateca, por cierto- apareció con el rostro golpeado. Al siguiente día, durante el desayuno, no explicó la causa de los golpes, pero le dijo a su madre que se iba a divorciar. Graciela casi se cae de espaldas como Condorito. Días después la nuera se presenta ante mi amiga para decirle:
Que había descubierto a su hijo caminando abrazado con una pasante. “Mi hijo dijo que la abrazó porque así son los jóvenes, la estaba consolando por un problema que tenía”.
Que quiere que su hijo la siga manteniendo. Ese mismo rato le sacó a Graciela 2.000 dólares para un tratamiento médico.
En otra visita su nuera –aún- le dijo que ella tenía derecho sobre la mitad de los bienes de Graciela.
Que como parte de esos derechos, quería que Graciela le diera 50 mil dólares.
   -Y acabo de enterarme –dice Graciela- que su familia ha sido de mecánicos y andan buscándole a mi hijo, seguramente con la intención de golpearle.
Graciela tuvo que buscar abogado para defenderse de esta chica “cara de mosquimuerta, que parecía que no quebraba un plato”, que sacó las uñas y puso a reflexionar sobre el ‘negocio del matrimonio’.

viernes, 6 de julio de 2012

CORREA BAJA EN LAS ENCUESTAS Y SE DESESPERAN

La curiosidad es natural en un periodista. Personalmente no puedo evitar preguntar a la gente qué opina sobre tal o cual cosa, las simpatías o antipatías hacia el gobierno. Y he visto que la simpatía por Correa, en la Sierra, va de bajada. Por eso la desesperación por captar los gobiernos provinciales de oposición, por eso los ataques a las ONGs a las cuales están muy vinculadas las organizaciones sociales de base, como la CONAIE, por eso la manipulación de las encuestas que le mantienen a Correa en la nube del 80%. Y nos creen tontos.

Les voy a transcribir unos párrafos de la columna “¿El 81,5% de respaldo?’, de Felipe Burbano de Lara, publicada en diario Hoy, el 26/Junio/2012:

“Resulta difícil entender la continuidad de la cifra de apoyo a la gestión del presidente Rafael Correa que le otorga la empresa Perfiles de Opinión. De acuerdo con el último sondeo de la encuestadora –mayo de 2012- el 81,5% de quiteños y guayaquileños considera buena (62,3%) o muy buena (19,2%) la gestión de Correa. Lanzada al aire cada mes sin mayores variaciones, la cifra se ha convertido en un poderoso instrumento político del Gobierno: todos los propagandistas de la revolución, con el mandatario a la cabeza, la citan como prueba irrefutable de los mayoritarios apoyos populares al proceso de cambio…”

“En las provincias de la Sierra central y de la Amazonía, recordémoslo, el presidente perdió en la última consulta popular. Y en Quito, donde logró un apoyo promedio del 49,1% en las 10 preguntas, la encuesta de Perfiles le da apoyos sostenidos del orden del 80%, antes, durante y después de la consulta…”

Veo que somos varios los que tenemos la percepción de manipulación de las encuestas. El encuestador oficial del palacio era Santiago Pérez que cayó en desgracia porque presentó encuestas de la consulta infladas a favor del gobierno. Hizo el ridículo público y se escondió, pero continúa haciendo sus encuestas para el gobierno, según pude ver en una entrevista que le hizo un canal de la Secretaría Nacional de Comunicación. Al desaparecer SP (Santiago Pérez) apareció la optimista Perfiles de Opinión con encuestas que coinciden con la de un spam lanzado en el 2011 por el capitan@freemailinglistserver.com (un capitán fantasma) que decía que Correa era el presidente más popular si no del mundo, al menos de América con el 75%. Desde ese momento sus encuestadores le mantienen alrededor de ese porcentaje y saltan cuando se dice lo contrario.

En diciembre 2011, diario Hoy publicó: “Según Market, la aceptación del primer mandatario a escala nacional es del 44,27%, cifra resultante del 49,75% de aprobación dada al mandatario en Quito y del 37,97% en Guayaquil”.

El diario estatal El Ciudadano le cayó enseguida con una réplica sustentada en una encuesta realizada por la encuestadora privada Perfiles de Opinión. Decía que Correa tenía el 79,6% de aceptación, lo que implicaba una diferencia de 35,33% respecto a los datos de Market.

Este dato fue incluso respaldado por Fernando Alvarado, secretario Nacional de Comunicación del Estado, quien salió a decir que lo de Market "no es una encuesta nacional. Se realiza solamente en Quito y Guayaquil, entrevistando aproximadamente a 700 personas". Pero Perfiles de Opinión se había basado en una encuesta a 633 ciudadanos mayores de 18 años de Quito y Guayaquil, o sea menos que Market.

La defensa que hizo Alvarado usando una encuesta de Perfiles de Opinión lleva a suponer que tienen algún nexo, como lo tenían con Santiago Pérez. Salía una encuesta privada que no gustaba al gobierno, enseguida estaba una de SP para responder.

Por curiosidad decidí mantener en esta página una columna permanente de encuestas y la última de Market (febrero 2012) dice que la popularidad de Correa está en 36%. De allí a 81,5% que dice Perfiles de Opinión, hay brecha gigantesca.

¿Quién exagera y más que nada, quién controla la veracidad y ética de las encuestadoras?

Para disipar mis dudas, yo hago mis encuestas.

Hace un año un amigo me contó que los 20 miembros de su familia votaron por Correa, ahora todos son anticorreístas.

Seguí mi encuesta con los taxistas. No sé si que por quedar bien con la cliente, todos se manifestaban –y hasta ahora se manifiestan- anticorreístas. Solo a un controlador de bus le escuché decir mientras pasaba cerca de una marcha de periodistas: “Yo no sé por qué protestan si con Correa estamos bien”. Pese al momento caliente, ningún pasajero, ni su jefe se pronunciaron sobre ese comentario.

Fui a visitar a una familia en el sur de Quito y de 3 personas, una era anticorreísta.

En plena campaña por la consulta me tocó viajar a la Sierra central, Tungurahua y Chimborazo, y de unas 50 personas con las cuales tuve contacto, solo una era correísta. Allí triunfó el NO (acerté en la encuesta). En todas las provincias de la Sierra (con excepción de Azuay e Imbabura, si mal no recuerdo) y de la Amazonia (con excepión de Sucumbíos, si mal no recuerdo) votaron por el NO y mis encuestas dicen que ese rechazo va en aumento.

Recientemente me encontré en Quito con un amigo soñador que me dijo: “Yo hice campaña por Correa sin recibir un centavo ni pedir un puesto y de los 300 afiliados a mi gremio, 298 votamos por Correa, ahora 298 somos anticorreístas”.

Y el último sondeo fue popular: la marcha por la minería de marzo durante la cual, si no hubiera sido porque cargaron en buses a gente de provincias, les dieron refrigerios, Quito habría estado vacío de correístas.

Razón tienen de estar desesperados y buscar encuestadores que les hagan creer que Correa está en las nubes.

viernes, 29 de junio de 2012

LUGO CAYÓ IGUAL QUE UMAJINGA

De regreso de un viaje acabo de leer que la Contraloría ha pedido la destitución del prefecto de Sucumbíos, como en días pasados lo hizo al prefecto de Cotopaxi a quien la argolla del gobierno ya le botó sin respetar ‘el debido proceso’, ni quórum, ni nada.

Eso confirma las sospechas de que el gobierno tiene un plan para poner seres serviles en los gobiernos seccionales liderados por opositores, creyendo que así revertirá la creciente resistencia de ‘los indios’ de la Sierra y la Amazonia que –si la elección es transparente- le pueden hacer perder la reelección a Correa. Por sondeos a la gente de la Sierra he podido observar que su aceptación está peor que antes de la Consulta Popular.

Me tocó ‘vivir’ en Latacunga justo cuando planificaban la destitución al Prefecto César Umajinga. Yo no sé cómo será su mandato, pero por el examen de auditoría de la Contraloría diría que sus ‘delitos’ son una lágrima frente a la corrupción de la argolla del gobierno denunciada por los medios, única tribuna de fiscalización que ha quedado en este país.

El examen de auditoría de la Contraloría determinó que “existió responsabilidad administrativa culposa” porque Umajinga tomó resoluciones al margen de la ley, como desembolsos indebidos, nombramientos sin los respectivos concursos, excesivo cobro de dietas, dobló sueldos y evidenció nepotismo. La sanción fue la destitución y el pago de una multa de 5.280 dólares.

No defiendo a Umajinga, a lo mejor cometió esas faltas, pero creería en la buena fe de la ágil Contraloría si también sancionara las faltas de la argolla del gobierno. Hablemos de nepotismo: la hermana, el primo del presidente ocupan altas dignidades; los maridos de las ministras de patrimonio y cultura ocupan cargos en la cancillería; el canciller tenía un hermano en ‘Inteligencia’; el secretario de la administración tiene a su hermano de secretario de comunicación y a su mamita de cónsul, etcétera, etcétera. De los contratos a parientes y testaferros, ni hablar, hasta un libro se escribió y los denunciantes son perseguidos; recién se denunció cómo el chofer de un vástago de un alto funcionario ganó un contrato por 4 millones de dólares. Los viajes de la argolla a Europa, la China y la Cochinchina son tan frecuentes como los de un clase media a las piscinas de los valles de Quito. Sería bueno que la ágil Contraloría dijera si esos viajes son debidamente justificados y cuánto gastan. (Los rumores de festines viajeros son terribles, por ejemplo, que un funcionario ordenaba buscar un seminario en el exterior cada vez que se peleaba con una de sus novias.) Un funcionario llevó de viaje a un hijo usando nombres falsos. De sueldos y sueldazos, ni hablar. Imagínense que un funcionario de quinta categoría de un canal del Estado gana más que el presidente de la república. ¿Cuántos funcionarios se encontrarán en esa situación? Señores de la ágil Contraloría: la mujer del César no tiene que parecer, tiene que ser.

El César Umajinga apeló ante el Tribunal de lo Contencioso y Administrativo. Estaba siguiendo ‘el debido proceso’ cuando siete alcaldes alineados con Alianza País, a escondidas de los presidentes de las juntas parroquiales (de Pachakutik) que también integran la Cámara Provincial encargada de juzgar a las autoridades, resolvieron destituirle al Prefecto y poner en su lugar a una mujer que correteaba como conejo por los pasillos oficialistas en busca del carguito.

A Umajinga le hicieron un ‘golpecito’ parecido al de Lugo en Paraguay, con la diferencia de que Lugo tiene a la UNASUR y a Correa que le defienden, Umajinga solo a su movimiento indígena. Y acabo de enterarme que algo parecido le están haciendo al prefecto de Sucumbíos, Orlando Grefa. La ágil Contraloría ha pedido su destitución. No nos sorprenda que pronto se den ‘golpecitos’ en Azuay, Carchi y otras provincias donde sus altas dignidades no se han dejado cooptar porque tienen principios. Qué equivocado está el gobierno al creer que tomando el poder provincial –para hacer obritas electoreras- va a revertir el rechazo de ‘los indios’ de la Sierra y la Amazonia.  El pueblo ya tiene un criterio formado sobre Correa y su argolla.

EL 'AMIGO'
Acabo de enterarme que Grefa ahora es amigo del gobierno y arman todo un drama para hacer creer que la acción de la Contraloría en contra de Umajinga no tuvo dedicatoria, hasta con 'amigos' como Grefa es "estricta". La intención pareciera ser amainar la furia indígena de la Sierra y tratar de romper su unidad con la Amazonia.

Contraloría multa y separa al prefecto de Sucumbíos
DIARIO HOY Publicado el 28/Junio/2012 | 00:04

Viceprefecto con orden de prisión

La contraloría ratificó la destitución del prefecto de Sucumbíos, René Orlando Grefa, a quien acusa de "responsabilidad administrativa culposa" por omisión, al haber detectado irregularidades administrativas en la construcción de proyectos de agua potable en el sector Campo Libertador, que se financiaron con recursos de Petroecuador y el Gobierno Provincial, pero que aún no se terminan. Asimismo le aplicó una multa por $ 5 280.

Además, remitió la resolución al Consejo Provincial para que los consejeros lo destituyan al prefecto y recauden la multa impuesta.

Grefa, (ex Sociedad Patriótica y cercano al Gobierno), rechazó la destitución y acudió a la Corte de Justicia de Sucumbios en donde presentó una acción de protección y medidas cautelares para que se suspenda el pedido de la Contraloría. En Sucumbios, el viceprefecto Oswaldo Calvopiña no puede actuar porque el Juzgado Primero de Garantías Penales emitió una orden de prisión preventiva en su contra, acusado por Grefa, de atentar contra la seguridad del Estado, tras descubrirse un acta en la que presuntamente planeaba destituirlo del cargo y asumir esas funciones.

Además de Grefa, la Contraloría destituyó hace dos semanas al prefecto de Cotopaxi, César Umajinga (Pachakutik), por supuesto nepotismo y presuntas fallas administrativas.

El contralor Carlos Pólit, quien estuvo ayer en Portoviejo hizo referencia a la destitución de los prefectos. "Hemos destituido con mucha pena a prefectos amigos porque no cumplieron con la ley".(AM)

miércoles, 9 de mayo de 2012

EN EL CENEPA PELEARON 8 MILITARES DE UNA MISMA FAMILIA. NINGUNO FUE DECLARADO HÉROE

Una familia de ocho militares participó en la guerra del Cenepa, el padre entrenando a los shuar, otros en el frente de batalla o en estado de alerta en El Oro, Loja, Quito. El patriarca, Lenin Torres (75 años), cuenta su historia.
Él fue un personaje controvertido dentro de las Fuerzas Armadas. Cuando teniente dio instrucción militar al famoso cantante Julio Jaramillo. Con él salía a dar sereno a las “guambras”. JJ tenía muchas y Lenin, dotado de buen físico y un uniforme, no se quedaba atrás hasta cuando Norma Rites cazó su corazón. También estuvo en la captura de los guerrilleros del Toachi, en 1962, apareciendo involucrado en una historia de amor con una guerrillera. Después, influido por el pensamiento de Sandino, con un grupo de militares jóvenes (algunos de los cuales llegaron a generales) intentó “una revolución parecida a la que hizo Alfaro”. Fue delatado. “Eso me costó cinco años de prisión”, dice, y le dieron la baja. En la vida civil se ha dedicado a las Alas Delta -es un maestro en ese deporte-, también a la seguridad privada, a la pintura, ha escrito cinco libros. Todo lo hace sin dejar de lado el espíritu militar que atrapó a sus hijos; cinco son militares: Yuri, Mao, Dean, Lenin, Sandino. Por si fuera poco, de sus tres hijas: Norma, Isabel y Nary Ati, dos se casaron con militares. SoloCamilo y Juan José no se interesaron por esta carrera.

EL VOLUNTARIO

Lenin Torres dice que los militares siempre estaban preparándose para recuperar el territorio perdido en 1941. “En 1981, cuando se dio el enfrentamiento en Mayaycu y Machinasa, me presenté como voluntario con mi boina roja de ex comando paracaidista. En 1995 se iniciaron las acciones en el Cenepa. Viajé de inmediato a la frontera, sector Loja y Zapotillo, donde se encontraban dos hijos míos: Mao y Dean. Tomé contacto con el coronel Fausto Flores, director del Seguro Campesino, quien viajaba con miembros de esa institución a Bomboisa, en las faldas de Cóndor Mirador, cerca de Gualaquiza, para instalar un campamento y dar instrucción militar al elemento civil, entre ellos shuaras. Le pedí hablara con el Ministro de Defensa, general José Gallardo, para que me permitiera integrarme a esa unidad como voluntario. Mi solicitud fue aceptada. Con Fausto y otros oficiales organizamos la instrucción para los voluntarios civiles que llegaban de todo el país, en especial de Guayaquil, y los shuaras. Yo tuve la oportunidad de viajar a Cóndor Mirador y Gualaquiza, donde se encontraba Paco Moncayo. Luego de las acciones de nuestra aviación y de artillería, nos dimos cuenta que estábamos en superioridad frente al enemigo. Entonces, decidí viajar a Quito para hablar con el Jefe del Comando Conjunto, general Víctor Manuel Bayas, y el Comandante General del Ejército, general Jorge Ortega, para decirles que era el momento de tomar la iniciativa y penetrar en territorio enemigo. La respuesta de los dos fue, que eso no quería el Presidente”.

ENTERRANDO MUERTOS

Durante la guerra del Cenepa, todos los hijos de Lenin Torres estaban en servicio activo, cada uno con una función.
El primero, Yuri Wladimir, 50 años, capitán retirado, integrante de Fuerzas Especiales, defendió Cueva de los Tayos, en el Alto Cenepa, un puesto militar constantemente bombardeado por los peruanos. Muchas historias tiene para contar.
“En una emboscada fue herido de muerte, el Cbos. Analuiza Wladimir, integrante de mi equipo de combate. Horas más tarde falleció en mis brazos, pidiendo ayuda. La falta de atención médica y la imposibilidad de evacuarlo hizo que se lo mantuviera un par de días velándolo en una capilla improvisada construida por los compañeros. Construimos un helipuerto en el medio de la nada para que ingresara un helicóptero para sacarlo, pero no hubo vuelos. Pedimos al mando la autorización para enterrarlo, así lo hicimos y luego de dos días reportaron la entrada de la aeronave. Desenterramos el cuerpo y nos disponíamos a evacuarlo, pero el clima se dañó y fue imposible. La disposición fue enterrarlo nuevamente y con el perdón de la familia y de la historia misma, dejarlo allí. Al día siguiente el sol brilló en la Amazonia y el helicóptero ingresó. Finalmente pudimos evacuarlo para que recibiera cristiana sepultura en su ciudad natal”.
Yuri relata otra anécdota: “Al recibir la misión inicial de alcanzar la cabecera del río Cenepa, nos dieron abastecimientos para tres días, munición, equipo de combate y una copia de un mapa peruano del sector, ya que no habían cartas topográficas ecuatorianas. Desembarcamos en la cordillera del Cóndor y teníamos tres días para cumplir la misión, pero marchando doce horas diarias en un terreno desconocido, difícil y a veces inaccesible, demoramos nueve días en alcanzar el punto. En el camino encontramos vestigios de combates, cuerpos de combatientes peruanos en descomposición, restos de aeronaves, etc. Allí recién comprendimos que teníamos que rendir el examen para el cual nos preparamos en las largas jornadas de entrenamiento, que la guerra se vive y se siente en el terreno, no en una sala de operaciones de combate, con mapas y papeles”.

TANQUES VIEJOS

Mao Fernando, 49 años, capitán retirado, también de Fuerzas Especiales, no estuvo precisamente en la línea de fuego, pero le tocó cuidar la frontera sur.
“Cuando el conflicto estuvo en su máxima alerta de los dos países, más o menos por febrero 13, mi unidad, el Grupo de Caballería Blindada No. 12 ‘Teniente Hugo Ortiz’, fue movilizada desde la península de Santa Elena hasta la frontera Sur para reforzar la Brigada No 7 ‘Loja’. Al llegar, en la población de Zapotillo nos encontramos de frente con una unidad de tanques peruanos. Al vernos con tanques de gran movilidad y relativamente nuevos, se quedaron sorprendidos y pienso yo, hasta se asustaron, ya que sus tanques eran viejos y de movilidad limitada. Los compañeros que estaban desde antes en el sector nos contaban que los peruanos lavaban sus tanques en la orilla del río Catamayo-Chira que dividía la frontera, para demostrar fuerza, atemorizar, pero en ciertas ocasiones, los tanques no se les prendían. Tenían que traer otros tanques para jalar a los dañados y sacarlos del río. En 1995, al vernos llegar con nuestros tanques, nunca más se dejaron ver ni salieron a lavar sus tanques”.

LAS MINAS SE MUEVEN

Cerca de su hermano Mao, en la puntilla de Zapotillo, estuvo Dean Andrés, de 45 años, Capitán de Artillería y de Fuerzas Especiales, ahora retirado, al mando de un Equipo de Combate de la Compañía de Operaciones Especiales No. 7, de la Brigada Loja. Su misión era infiltrarse el Día D, 5 kilómetros en territorio hostil para destruir con explosivos cañones de Artillería de 155mm del ejército enemigo.
Dean salió vivo por milagro, según este relato: “Un día mientras patrullaba mi sector de responsabilidad buscando el mejor lugar para la infiltración, el puntero de mi patrulla levantó el puño en señal de ¡alto! y ordené que todos se inmovilizaran inmediatamente. Por estar atentos a los movimientos contrarios, los 18 soldados de mi equipo, sin darnos cuenta, habíamos ingresado en ‘campo minado’ sembrado por el enemigo en nuestro propio territorio. La lluvia y el tipo de tierra habían hecho salir y ‘caminar’ algunas minas y las pudimos ver medio enterradas en el camino donde estábamos, pero sin saber cuántas eran en realidad y dónde estaban. Lo que nos demoró un minuto en entrar, nos tomó más de 3 horas en salir. Para esquivar a las minas aplicamos la vieja técnica de la bayoneta, dando un paso cada 5 y 10 minutos hacia una quebrada. El soldado que caminaba detrás de mí descubrió una mina a 10 cm de su pie derecho, justo donde yo había pisado. Tuvimos mucha suerte al no activar ninguna mina cuando entramos en el campo y todos salimos ilesos en esa ocasión, pero muchos combatientes perdieron la vida o parte de sus cuerpos al explotar minas antipersonales en ese conflicto”.

BEBÉ EN GUERRA

Lenin Maximiliano, 43 años, capitán retirado del Ejército, piloto de helicópteros, estuvo en El Oro, sector Tres Cerritos, como piloto de helicópteros de combate del Grupo de Aviación del Ejército, GAE - 42 ‘Portoviejo’. Unos días salió comandando un vuelo a Patuca, desde donde se realizaban las operaciones al Alto Cenepa.
Estaba en Tres Cerritos cuando le sucedió algo especial. “Me llegó un comunicado de que mi primera hija Millysen Valeria, estaba por nacer y, ventajosamente, me autorizaron para salir dos días a Quito. Cuando llegué, la niña ya tenía unas horas de nacida. Para mi fue maravilloso poder ver a mi hijita. Fue una renovación de mi alma y de mi espíritu, en plena guerra. Las horas volaron y regresé enseguida a incorporarme a mi unidad”.
Su hermano Sandino, 46 años, capitán retirado, piloto del Ejército, permaneció en Quito cumpliendo funciones administrativas.

LOS YERNOS

Junto con los hijos, al frente de batalla fueron los yernos de Lenin Torres.
Francisco Cobo, 49 años, coronel retirado del Ejército, en 1995 era de Fuerzas Especiales. Le asignaron la vigilancia de la provincia de El Oro.
Marco Garrido, 47 años, capitán retirado del Ejército, quien entonces fuera yerno de Lenin, estuvo enrolado a Fuerzas Especiales, con la misión de defender Tiwintza, la base más codiciada por los peruanos, convertida en símbolo de aquella guerra.
Esta familia de militares que ha peleado en todas las guerras contemporáneas, no tiene héroes. “Solo Yuri recibió un diploma especial y no reclamamos nada porque todo lo hicimos por amor a la Patria, era nuestra obligación como militares y ecuatorianos. Para mí son héroes solo los muertos y los estandartes de las unidades que estuvieron en combate ”, dice el padre.


El 27 de enero 2015, cuando estaba celebrándose el vigésimo aniversario del enfrentamiento bélico en el Cenepa, volví a preguntarle a Lenin Torres, padre, si el gobierno de Correa que hizo una selección de héroes, les incluyó en la lista y Lenin reiteró que no.  En la selección no tomaron en cuenta los partes de guerra, solo los golpes en las puertas claves.